La verdad está ahí fuera
El ingreso (o no) de María José Campanario y las extrañas llamadas de Kiko Hernández
Según el colaborador de 'Salvame' la mujer de Jesulín está ingresada, pero ella afirma que no. Pero lo más raro de este rifirrafe son las extrañas llamadas en el teléfono de Kiko
Kiko Hernández puso a rodar una bola el pasado miércoles 12 de julio en 'Sálvame' que nadie ha podido parar, hasta ahora: el colaborador del programa presentado por Jorge Javier Vázquez aseguraba que María José Campanario había sido ingresada en un centro psiquiátrico de Málaga, víctima de una grave depresión.
A nadie le extrañó demasiado dado que la mujer de Jesulín de Ubrique lleva años padeciendo los contratiempos de una enfermedad tan dura como la fibriomialgia y porque además, ha sufrido varios desencuentros en frentes diferentes: por un lado los enfermos de esta misma enfermedad han criticado la actitud de María José Campanario que la acusan de aprovecharse del dolor para hacer caja. Casi al mismo tiempo, un mensaje subido en su cuenta de instagram donde decía sobre Andreita "No es mi hija, pero como si lo fuese", hizo que Belén Esteban sacara las uñas. Y finalmente, hasta la correcta Carlota Corredera tuvo un rifirrafe en directo con mensajes bastante duros a través de sus cuentas de Instagram.
Así que cuando Kiko Hernández soltó la bomba en el programa de sobremesa de Telecinco, nada parecía aventurar que esa información no fuera correcta. Sin embargo, según algunos medios como Esdiario, Maria José podría estar incomunicada y centrada en su recuperación física por prescripción médica, pero no ingresada en el centro de salud El Seranil, como se dijo en un primer momento. Ella misma asegura que no está sufriendo una severa depresión y que se encuentra en su casa, en mitad del campo, recuperándose.
Hasta aquí el primer capítulo de esta rocambolesca historia, que esta misma mañana, en el programa de María Patiño, 'Socialité', sufría un pequeño giro de guión. Una llamada del propio Kiko Hernández no solo relataba cómo se había enterado él del ingreso de Campanario, sino que contaba, con pelos y señales, cómo la mujer del torero podría haber estado ingresada, primero en una clínica de Jeréz, para haber sido trasladada posteriormente a la de Málaga. El colaborador daba además un apunte muy significativo al afirmar que en este mismo momento, en un restaurante situado frente a la clínica, estaba Jesulín de Ubrique comiendo con el director del centro de salud.
Pero lo más sorprendente de todo el relato, es un extraño suceso relacionado con el móvil de Kiko, que haría estremecerse al propio Iker Jiménez, presentador de 'Cuarto Milenio': al parecer, esta semana, el presentador ha estado recibiendo un sin fin de llamadas que en realidad estaban dirigidas a… ¡María José Campanario! Cada vez que el móvil de Kiko sonaba, las llamadas en realidad esperaban encontrar al otro lado a la mujer del de Ubrique. En un principio Kiko Hernández pensó que 'la Campa' había desviado las llamadas del teléfono al suyo para fastidiarle por lo que estaba contando, pero cuando empezó a recibir llamadas de la madre de Campanario e incluso de Jesulín, el colaborador dedujo que María José estaba siendo objeto de un sabotaje, de una burla, porque como bien decía Kiko: “si vas a hacer algo así, avisas a tus familiares y amigos para que no te llamen”.
Así que el misterio se ha multiplicado: ¿quién desvió el teléfono de María José? ¿está realmente ingresada o está en su casa como ella supuestamente dice? ¿Tiene esto algo que ver con el hecho de que María Patiño haya perdido una demanda contra la mujer del torero? ¡Iker, te necesitamos!
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