Valentino se atreve con la ropa barata

Santi Meifrén  -  08/11/2007

Valentino se atreve con la ropa barata
 

El diseñador Valentino Garavani vive uno de sus momentos más dulces de homenaje en homenaje. Pese a que ha anunciado su retirada de la alta costura, ha sido seducido por unos grandes almacenes para diseñar ropa a precios asequibles. Y en esta ocasión no se trata de H&M.

Su reciente paso por Barcelona para recibir un premio y presidir una jurado de moda, le ha servido al creador para replantearse su futuro. Valentino presentará en enero, en París, su última colección de alta costura. Como no quiere disfrutar de una jubilación dorada, ha decidido seguir vistiendo a la mujer, pero sin el agobio de presentar dos colecciones al año. Dándole vueltas al horizonte, su gran amiga y confidente, Nati Abascal, le puso en contacto con el presidente de Mango. Por ello, aceptó visitar la capital catalana, con la perspectiva de cerrar algún que otro negocio. ¿Preparar una línea con su nombre para ser comercializada mundialmente? Eso eslo más probable.

Nati, fiel amiga del maestro de la costura, es una mujer de glamour. Sin embargo, no sólo lleva ropa de marca. También compra en grandes cadenas y mezcla estilos distintos. Pese a ello, su look sigue siendo estupendo.

Tomando al pie de la letra el ideario de Valentino -“no puedo estar un día sin crear”- es fácil deducir que tras el adiós sigue habiendo mucha vida profesional. Pasarse a la ropa democrática, más barata que la de alta costura, es una buena manera de llegar a mucha más gente. Nombres como Cavalli o Vikor&Rolf, se han acercado al pueblo con colecciones de nivel a precios asequibles para todos. Este puede ser el futuro más inmediato de Valentino.

A parte de Nati Abascal, que en el desfile y entrega del premios de 300.000 euros instaurado por la firma de moda catalana, estuvo al lado de Valentino Liz Hurley. La modelo inglesa lució un vestido rojo –el color preferido por el modisto- y tuvo a Luis Medina, hijo de Nati como principal aliado de confidencias durante el acto. Tras su paso por Cataluña, la sensación que ha dejado Valentino es la de ser una persona cercana, amable, respetuosa y nada divo. Ahora su ropa también lo será.

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