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Sábado, 11 de julio de 2009

Algo tendrá Yves Saint Laurent que a todas enamora. El modisto francés lleva más de cincuenta años en el mundo de la moda y cada una de sus colecciones sigue siendo tan exitosa como aquella Ligne Trapéese que vio la luz en 1962, cuando el diseñador, argelino de nacimiento, fundó su propia casa de modas. Ese éxito viene avalado por el apoyo de las celebrities, que utilizan sus modelos en las numerosas citas a las que acuden. Aunque parece que los gustos son, en muchas ocasiones, tan similares que el vestido elegido es el mismo.

Eso ha ocurrido con un vestido de la colección primavera 2008 al que las estrellas de Hollywood parecen haber cogido cariño. Ni más ni menos que cinco rostros conocidos han lucido el modelo, con el que Kate Moss posa como imagen de la colección, en el último mes. La actriz Gwyneth Paltrow acudió con el vestido, de corte recto hasta la rodilla en color gris y con escote palabra de honor, a la entrega de premios Prince Trust success en Londres. La cantante Rihanna lo lució en uno de los múltiples actos que suele frecuentar, aunque lo acompañó con un collar negro de tamaño XXL y unas sandalias blancas, en contraste con la chaqueta, botines y medias negras que utilizó Paltrow. Además de ellas, también se atrevieron a lucir el modelo en cuestión la pelirroja Julianne Moore, Sarah Shahi y Katie Lee Joel.

La exótica Sarah Shahi, modelo, actriz y ex Cheerleader de los Cowboys de Dallas complementó el vestido con unos zapatos de color azul eléctrico para aportar un toque de color al conjunto, mientras que la celebrity Kate Lee Joel, tercera esposa del prolífico músico Billy Joel, lució el traje con un cinturón de talle alto color negro y unas sandalias del mismo color.

El vestido del modisto francés parece haber causado sensación en la meca de cine, aunque la devoción por Saint Laurent no es nada nuevo para este icono de la moda que cumple este año 62 primaveras acostumbrado al éxito y al trabajo en la costura desde los 18 años, la edad con la que entró a trabajar en la casa Dior. Seis años más tarde, cuando tuvo que dejar la firma para hacer el servicio militar, el joven Yves ya había sustituido en su puesto al propio creador de la firma.

Tras dos años cumpliendo el servicio militar francés, volvió a Dior donde, para su sorpresa, le había sustituido por su propio asistente, Marc Bohan que presentaba unos diseños que mostraban una mujer con aires de ‘niña bien’, acorde con la tendencia de la época. Saint Laurent denuncio a la casa de modas. Con el dinero que obtuvo y la ayuda de su inseparable Pierre Bergé y del inversor Mack Robinson ese mismo año estaba a la venta su primera colección con su nombre, Yves Saint Laurent, como firma.

Pero… ¿dónde radica el éxito del modisto? Quizá sea por su forma de innovar, de realizar moda más democrática y asequible, o por su gusto por todo lo artístico. Tanto es así, que a pesar de no haber optado por la vía pictórica o la teatral –que le tentó durante su época de estudiante- , ha pasado a la historia como el primer diseñador que ha expuesto en un museo, en este caso en el Metropolitan de Nueva York.

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