Alberto de Mónaco, el único soltero real

Con Victoria de Suecia a las puertas del altar, Alberto de Mónaco se ha convertido en el soltero de oro de la monarquía europea. Y es que el hermano de Carolina y Estefanía se resiste a pedir en matrimonio a Charlene Wittstock, la sudafricana a la que apartó del mundo de la natación para convertirla en la nueva Grace Kelly. Y es que tras años de incertidumbre, todos los herederos reales y reyes están felizmente casados.  

A sus 50 años, Alberto está oficialmente soltero y su heredero es su sobrino Andrea, muy apartado últimamente de los asuntos del principado. Desde hace años, el soberano mantiene un noviazgo con Charlene, que se mueve en un segundo plano. Y es que parece que se resiste a pedirla en matrimonio aunque la edad juega en su contra. Sin embargo, y pese no haber pasado por la vicaría, el príncipe tiene dos hijos ilegítimos fuera del matrimonio: un niño de corta edad y una adolescente americana. La suya puede convertirse en la primera boda de un rey en años.

Pero todos los herederos reales, tras picotear de flor en flor, han conseguido asentar su vida sentimental. La última en sumarse a la lista ha sido Victoria de Suecia. Tras siete años de noviazgo, ha logrado convencer a su padre para casarse con Daniel Westling, un monitor de gimnasio que ascendió en el escalafón social gracias a su relación. Ambos se darán el ‘sí quiero’ a principios de verano en una cita que reunirá a toda la realeza europea. Sus hermanos, felizmente emparejados, esperan ansiosos esta boda para poder pasar después por el altar.

El resto de herederos esperan su turno para reinar ampliando la familia a golpe de embarazos. Matilde de Bélgica, casada con el Príncipe Felipe, ha sido madre de cuatro hijos en sus nueve años de matrimonio. En Holanda, los herederos Guillermo y Máxima esperan a que la Reina decida jubilarse como sus antecesoras en el cargo mientras cuidan a sus tres niñas. También son tres los hijos que tienen Haakon de Noruega y su esposa Mette-Marit, que aportó un hijo de soltera a este peculiar matrimonio. Aunque en un principio nadie la aceptaba, al final se ha ganado el cariño del público.

Historias paralelas se viven en Dinamarca y España. Federico y Felipe se enamoraron casi a la vez de mujeres plebeyas con profesiones liberales. Sólo ocho días separaron sus bodas. De hecho, Letizia hizo su gran debut internacional en el enlace del heredero danés con Mary Donaldson, importada desde la lejana Australia. Ambas parejas tienen dos hijos que han nacido en los mismos años con escasos meses o semanas de diferencia. Sin embargo, a los pequeños príncipes holandeses les vemos crecer a través de continuas fotos, mientras que a las infantas se las ve tres veces al año.

Mención aparte merece el caso de Gran Bretaña. El heredero ya lleva muchos años casadero. A sus 60 años, se casó en primeras nupcias con Lady Di, matrimonio que fue un tormento de principio a fin. Tras su muerte decidió emparejarse oficialmente con su amante, Camilla Parker-Bowles, que poco a poco es aceptada por el pueblo. Ahora espera que su longeva madre le deje paso tras más de medio siglo como heredero. Una larga espera en la que por suerte siempre ha estado bien acompañado.