El secreto mejor guardado de Sofía Hellqvist: tiene un lujoso piso en Sudáfrica

Cuando parecía que Sofía Hellqvist había conseguido superar el rastro de su turbio pasado y que los suecos la empezaban a ver con buenos ojos, una nueva noticia publicada en el diario Expressen ha provocado que se haya vuelto a poner en duda su idoneidad para asumir el papel de princesa. Y es que este conocido periódico ha descubierto que la esposa del príncipe Carlos Felipe posee una lujosa residencia en Sudáfrica que adquirió el pasado mes de noviembre, solo seis meses después de anunciar su compromiso oficial con el hijo de los reyes Carlos XVI Gustavo y Silvia.

Como realizó la compra antes de contraer matrimonio, en el registro civil de Sudáfrica, la vivienda está registrada a nombre de Sofía Kristina Hellqvist con estado civil soltera. El piso que adquirió Sofía se encuentra en una de las zonas más exclusivas de Ciudad del Cabo, a tan solo 250 metros del océano Atlántico. La vivienda cuenta con 72 metros cuadrados y forma parte de un edifico de 105 apartamentos que tiene piscina, gimnasio, garaje y lavandería. Asimismo, cuenta con un equipo de vigilancia las 24 horas del día. Para comprar este piso, la ahora princesa ha desembolsado 1,3 millones de coronas suecas, unos 139.000 euros.

Desde hace años, los viajes de Sofía a Sudáfrica han sido constantes. Antes de contraer matrimonio con Carlos Felipe, la princesa creó junto a una socia la fundación Project Playground, una organización dedicada a desarrollar proyectos humanitarios en zonas de necesidad como el continente africano. Al casarse con un príncipe y pasar a formar parte de la familia real sueca, Hellqvist tuvo que dejar la presidencia de la fundación, pero su vínculo con África ha continuado igual de intacto.

Hace apenas una semana, Sofía se desplazó hasta Sudáfrica para participar, ya como princesa de Suecia, en el Global Child Forum. Durante su discurso, la esposa de Carlos Felipe confesó que en África se sentía como en casa: “He pasado tanto tiempo aquí que me siento como en casa”. Ahora ya entendemos el porqué.