Los malos rollos 'cuñadiles' llegan a la Corte británica de la mano de Harry y Kate

Unas tiernas imágenes han desatado la polémica en Reino Unido. En ellas aparece el príncipe Harry jugando,abrazando y besando a Mia Tindall, la hija de su prima Zara Phillips. Aunque podrían ser consideradas unas fotografías familiares que demuestran la buena sintonía que existe entre los Windsor, hay quienes han ido más allá y consideran que son una prueba de que Harry y la duquesa de Cambridge no se llevan demasiado bien. El motivo es que jamás se han tomado retratos del benjamín de Carlos y Lady Disiendo tan cariñoso con sus sobrinos, los príncipes George y Charlotte. En ninguno de los eventos que ha coincidido con ellos se le ha visto hacerle ninguna carantoña a los pequeños y eso se debe, según las malas lenguas, a que no se lleva bien con Kate.

Los rumores sobre una fría relación entre los cuñados vienen ya de lejos, pues siempre se ha dicho que el príncipe ve a la mujer de su hermanocomo una mujer interesada y nunca ha soportado a los Middleton y su afán de protagonismo. "Harry está un poco harto de la sobreexposición deKate y su familia. Le gustaría que tuvieran un perfil más bajo", declaraba una fuente al diario 'Daily Mail' hace unos meses. Esta sería la principal causa por la que el príncipe no se mostraría tan cariñoso con George y Charlotte como lo es con la hija de su prima Zara. En la celebración delTrooping the Colour, por ejemplo, estuvo al lado de sus sobrinos y apenas se dirigió a ellos.

División de opiniones

Mientras unos aseguran que Harry y Kate se llevan mal, otros piensantodo lo contrario e incluso han llegado a decir que la duquesa de Cambridge estaría secretamente enamorada de su cuñado. En algunos actos oficiales, se ha visto a los dos muy cómplices y eso ha provocado que se levanten los rumores. Unos explican esas imágenes diciendoque "Harry es un buen actor y sabe disimular su frialdad con Kate ante las cámaras" y otros que "la buena sintonía entre la esposa y el hermano del príncipe Guillermo es palpable".

La historia se repite

Las malas relaciones entre cuñados están a la orden del día en la realeza europea y en España tenemos el mejor ejemplo. La infanta Cristina y Doña Letizia empezaron llevándose muy bien. La exduquesa de Palma fue una de las que más apoyó a su hermano en su noviazgo con la periodista. Sin embargo, las cosas se torcieron con el paso de los años. Según se cuenta, el detonante de su distanciamiento fue que la ahora Reina no quiso hospedar a los padres de Iñaki Urdangarin en su casa porque se encontraba embarazada de la princesa Leonor. Este detalle sentótan mal a Cristina que desde entonces apenas mantenía contacto con su cuñada. Tanto es así que en la celebración del Día de la Hispanidad de 2011 no se saludaron.

Quienes tampoco se llevan (o llevaban) demasiado bien son la princesa Magdalena y su cuñada Sofía. La benjamina de los reyes de Suecia no aceptaba el pasado polémico de la novia de su hermano y le hizo la vida imposible durante años. No la invitaba a los eventos familiares, no le dirigía la palabra e intentó a hacer una campaña para desacreditarla. Finalmente, Carlos Felipe consiguió su sueño y se casócon la mujer a la que amaba, algo que Magdalena acabó aceptando. Ahora parece que ambas mujeres han limado asperezas y tienen una cordial relación de cuñadas.

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