El "buenos días" de la infanta Cristina al ser preguntada por la sentencia del caso Nóos

La vida sigue igual. Así lo cantaba Julio Iglesias y así parece pensarlo la infanta Cristina, que este lunes reanudaba su quehacer diario en Ginebra, ciudad desde la que recibió la noticia de su absolución con respecto al caso Nóos y también la pena de seis años de cárcel para su marido, Iñaki Urdangarin. A las siete de la mañana, la hija de Don Juan Carlos salía de su domicilio y era recogida por un coche privado.

Como era de esperar, Cristina vio cómo un periodista se le acercaba para preguntarle por la sentencia y para saber cómo se sentía. Ella, sonriendo ligeramente, evadió la respuesta y soltó un "buenos días". La infanta continúa trabajando para la Fundación La Caixa, para la que actualmente coordina los programas con agencias de la ONU desde Ginebra, donde el matrimonio vive desde el verano de 2013.

El fin de semana algunos miembros de la familia entraron y salieron de su casa en distintos momentos y con este motivo se pudo también ver a agentes de seguridad. En ningún momento se vio al esposo de la infanta, Iñaki Urdangarin, que parece desaparecido desde que el viernes se supo que era condenado a seis años de cárcel por su implicación en el caso Nóos. Durante estos últimos meses, los exduques de Palma han tenido tiempo para adecuar su vida y la de sus hijos a esta nueva etapa que se presenta en la familia. Los dos hijos mayores han estado al tanto de lo que podía suceder con el futuro de sus padres y tuvieron y tendrán apoyo para asimilar la sentencia judicial. El futuro cambio de domicilio de Ginebra a Lisboa solo afectará a los dos más pequeños. El mayor iniciará el curso que viene sus estudios universitarios fuera de España y el segundo continuará como hasta ahora en un centro de Estados Unidos.

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