Es noticia
Menú
Iñaki Urdangarin encara "fuerte y tranquilo" sus posibles salidas inminentes de prisión
  1. Casas Reales
CUMPLE UN CUARTO DE CONDENA

Iñaki Urdangarin encara "fuerte y tranquilo" sus posibles salidas inminentes de prisión

El marido de la infanta Cristina cumple hoy un cuarto de condena y puede pedir hasta 18 días de permiso por semestre. En unas semanas podría pasar a clasificación de tercer grado

Foto: Iñaki Urdangarin, en Pozuelo. (José Martín)
Iñaki Urdangarin, en Pozuelo. (José Martín)

“Fuerte y tranquilo: feliz”. Así encara Iñaki Urdangarin su futuro tanto dentro como fuera de prisión, según su entorno. Ha pasado ya un cuarto de condena en la cárcel y llega pues un momento decisivo para el marido de la infanta Cristina: puede pedir que le otorguen permisos.

LEA MÁS. El durísimo auto del juez sobre Urdangarin: vive "deshumanizado"

Nadie más que él sabe lo que hará, nos dejan claro todas las fuentes consultadas, así que todo lo que contemos aquí deberá ser refrendado por los hechos futuros que, como tales, no podemos predecir. Sí podemos, en cambio, contar las posibilidades que se le abren al exduque de Palma a partir de este jueves 28 de noviembre.

placeholder Iñaki Urdangarin, a su salida del Hogar Don Orione de Pozuelo de Alarcón. (EFE)
Iñaki Urdangarin, a su salida del Hogar Don Orione de Pozuelo de Alarcón. (EFE)

Por el momento, puede optar a tener permisos. Tal y como manda el reglamento penitenciario y como nos indican los expertos consultados -incluida la Dirección General de Instituciones Penitenciarias-, los presos en segundo grado, que es el régimen en el que se encuentra Urdangarin, tienen derecho a 36 días de permisos divididos en semestres, lo que supone que pueden optar a 18 días de permiso en un semestre. Eso siempre y cuando hayan cumplido el citado cuarto de condena que celebra el cuñado de Felipe VI este jueves.

Situación favorable

Una vez los reclame, será decisión de la prisión otorgárselos o no. Si se los conceden, la forma de disfrutarlos depende del propio reo. Lo más lógico es que pida pasar días de Navidad con su familia, pero podría solicitar varios días seguidos en otro momento porque sus hijos, pongamos, tienen una 'semana blanca' en la escuela y pueden estar todo el tiempo con él. Lo que queda claro es que si Urdangarin quiere, lo más probable es que pueda pasar las fiestas navideñas con su familia, ya sea en Madrid o en Vitoria, como mandaba la tradición antes de perder la libertad. Será el preso, y no su abogado, quien solicite los permisos con un documento firmado en prisión para poder obtener estos beneficios que les hemos contado.

placeholder La infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, en el cumpleaños de Guillermo de Holanda. (Getty)
La infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, en el cumpleaños de Guillermo de Holanda. (Getty)

Esos permisos, de todos modos, nada tienen que ver con el tercer grado. Esta modalidad la puede pedir un preso desde el primer momento en el que entra en prisión; otra cosa es que se lo den. En el caso de Urdangarin, lo ha pedido varias veces, según han informado algunos medios, pero siempre se lo han denegado. Lo más sencillo suele ser lograrlo una vez se ha cumplido un cuarto de la condena, cosa que sucede este jueves, como hemos remarcado.

Revisión semestral

La clasificación penitenciaria de todos los presos se revisa cada seis meses, contados desde el momento en el que esta se realiza. Es decir, si Urdangarin entró en junio y se le destinó a segundo grado nada más ingresar, la modalidad de su internamiento se revisará en diciembre. En pocas semanas, pues, podría obtener el tercer grado, que tiene diferentes modos de aplicarse y la más conocida es la de pasar el día fuera y pernoctar en prisión o en un centro de reinserción social.

placeholder La reina Sofía con los hermanos Urdangarin en 2014. (Getty)
La reina Sofía con los hermanos Urdangarin en 2014. (Getty)

El artículo 36 del Código Penal señala que "la clasificación del condenado en el tercer grado deberá ser autorizada por el tribunal previo pronóstico individualizado y favorable de reinserción social, oídos el Ministerio Fiscal e Instituciones Penitenciarias". Además, cuando se trata de penas de más de cinco años, el juez o el fiscal pueden decidir que el condenado no pueda acceder al tercer grado hasta que haya cumplido la mitad de la pena, pero es en casos de pertenencia a banda armada o de asociación mafiosa, algo que no tiene relación con los delitos económicos de Urdangarin.

LEA MÁS: Móvil, escolta... Todos los detalles de las salidas de Urdangarin para hacer de voluntario

Otras cuestiones que son favorables a la obtención de un tercer grado son el arraigo y la situación familiar, algo que Urdangarin ha resuelto de forma inteligente. Desde el 19 de septiembre, el exduque de Palma sale dos veces por semana, martes y jueves, para realizar un voluntariado. Pasó muchos meses en busca de un trabajo o una ocupación fuera de prisión para poder tener una estabilidad en el exterior. Y aunque su abogado, Mario Pascual Vives, lo negó en su momento, el tiempo confirmó las informaciones, adelantadas por Vanitatis, de que Urdangarin había estado buscando trabajo.

Juan o Vitoria

El voluntariado, una forma de trabajo no remunerado, ha sido la salida que más se amoldaba a sus necesidades. Otra cuestión importante, si quiere pasar días y noches fuera de casa, es tener un hogar en el que pernoctar. Y aunque hay presos que llegan a dormir en el despacho de sus abogados una vez logran los permisos, parece que la situación de Urdangarin será más cómoda. Porque podría acercarse a Vitoria, donde está su familia, o contar con su hijo mayor, Juan, a quien se ha sido visto más en Madrid en los últimos meses que de costumbre.

placeholder Juan Urdangarin, llegando a la fiesta de su prima Victoria de Marichalar, en Madrid. (Limited Pictures)
Juan Urdangarin, llegando a la fiesta de su prima Victoria de Marichalar, en Madrid. (Limited Pictures)

“Lo han hecho muy bien, han conseguido que el asunto aburra a la gente”, dice una persona de su entorno. “Él está muy bien, como ha estado en estos últimos meses, se ha dedicado a practicar deporte, que es lo que le sienta mejor, ha adelgazado y todo de tanto entrenar, pero psicológicamente está fuerte y tranquilo: feliz”, añaden. Porque la luz al final del túnel llegó hace tiempo y parece que ahora solo queda esperar más buenas noticias.

“Fuerte y tranquilo: feliz”. Así encara Iñaki Urdangarin su futuro tanto dentro como fuera de prisión, según su entorno. Ha pasado ya un cuarto de condena en la cárcel y llega pues un momento decisivo para el marido de la infanta Cristina: puede pedir que le otorguen permisos.

Iñaki Urdangarin Infanta Cristina