Cuando Keira Knightley fue esclava de Christian Grey

Publicidad incesante y el nombre de Christian Grey por todas partes. No cabe duda de que si hay un estreno cinematográfico esperado este fin de semana, ese es el de Cincuenta sombras de Grey. Sin embargo, la carrera sentimental de su protagonista, Jamie Dornan, no es tan famosa como el personaje que le ha llevado a la cima. Si en la ficción ya conquistó a la mismísima reina María Antonieta en la famosa película de Sofía Coppola, en la vida real mantuvo romances más o menos duraderos con actrices muy populares.

El de Keira Knightleyfue quizá el más puro de todos, porque llegó en 2003, antes de que ninguno de los dos fuese excesivamente popular. Sucedió cuando ambos empezaban sus respectivas carreras. Él tenía 21 años, ella 18 y ambos daban sus primeros pasos profesionales. Pese a haber aparecido en películas como The Hole o Quiero ser como Beckham, Keira no era la estrella consumada que es hoy por hoy, con una carrera que incluye ya alguna nominación al Oscar.

Él desfilaba para las mejores firmas y era ya un rostro prometedor en el universo de las pasarelas. Fue la moda, de hecho, la que los unió, ya que coincidieron en una sesión fotográfica en Manhattan y ahí fue cuando saltó la chispa. Si en la ficción James Grey puede esclavizar sexualmente a la fémina que se le ponga a tiro, no ocurrió lo mismo con la protagonista de Expiación. Uno de los mayores problemas de la pareja fue, precisamente, el de los amigos de ella.

Cuando años más tarde Dornan intentó sin éxito llegar a ser músico sin demasiado éxito, pudo hablar sin tapujos de la relación que había tenido con la actriz. “Puedo verte con tus tontos amigos mientras intentan robar tu inocencia”, dijo una vez que la relación se había roto, en 2005. Para Dornan, la decisión de Keira de dejarle fue una de las más duras de su vida y es un hecho que le costó algo de tiempo rehacer su vida. Los que los conocían de cerca sabían que la relación era demasiado tormentosa y que Keira empezaba a volar en círculos a los que el Grey de la ficción no estaba demasiado acostumbrado.

Nada de encuentros

No parece que la ruptura fuese demasiado amistosa. Y si no, que se lo digan a los periodistas que estaban presentes en la reciente entrega del Tea Party de los BAFTA que se celebraba hace tan sólo un mes en California. Ambos estuvieron en los mismos grupos de gente e incluso saludaron a la modelo Cara Delevingne. Sin embargo, planearon calculadamente no ser fotografiados juntos y ni siquiera se dirigieron la palabra.

Keira estaba muy ocupada al lado de su marido, James Righton, con el que va a tener un hijo. Él acudió solo, pero tampoco se ha quedado para vestir santos precisamente. Desde 2013 comparte su vida con Amelia Warner y ambos tienen una hija en común llamada Dulcie. Vamos, que las fustas y las salas llenas de objetos sexuales se quedan en la ficción. Lo que no se queda en la ficción es aquella relación con Keira Knightley, un noviazgo de guapos que acabó como el rosario de la aurora y que probablemente daría para varios best sellers tan populares como el de Christian Grey.