Es noticia
Menú
Adiós a Michele Ferrero, el hombre más rico (y dulce) de Italia
  1. Celebrities
CREADOR DE FERRERO ROCHER, KINDER Y NUTELLA

Adiós a Michele Ferrero, el hombre más rico (y dulce) de Italia

Si uno piensa en multimillonarios italianos, vienen a la mente nombres como Agnelli, Berlusconi o Armani. Pero la primera fortuna era la de un chocolatero del Piamonte, fan de la Virgen de Lourdes

Foto: El multimillonario italiano Michele Ferrero en un montaje fotográfico realizado por 'Vanitatis'
El multimillonario italiano Michele Ferrero en un montaje fotográfico realizado por 'Vanitatis'

Era distinto. No solo por una fortuna de 20.500 millones de euros (primera de Italia y cuarta de Europa), sino porque pertenecía a una clase de empresarios que comenzó a desaparecer cuando él era joven. Sagas como Agnelli, Carnegie o Rockefeller. Aquellos que levantaban industrias, en lugar de especular en código binario. Economía productiva versus economía financiera. Michele Ferrero (Dogliani, 1925 – Montecarlo, 2015) regaló al mundo la Nutella el 20 de abril de 1964. Mejoró un dulce creado por su padre, Pietro Ferrero, que usaba más avellana local frente al carísimo chocolate en una época difícil. La industria Ferrero comenzaba a ser boyante en la Italia de los 50 y se convirtió en líder en la década siguiente. Desde el pequeño pueblo de Alba –cuna del tartufo bianco–, conquistaron Europa a lo largo de los 70, lanzaron en los 80 el huevo Kinder y se convirtieron en referencia mundial durante los 90.

Suyos son también Ferrero Rocher, Tic Tac y Mon Chéri. La facturación anual de Ferrero se estima en torno a los 8.000 millones de euros anuales, con una cuota de mercado del 8%. Solo la multinacional Nestlé les supera con un 12% en el ramo de la confitería. Ahora que el creador del imperio Ferrero acaba de irse, es momento de saber qué lo hacía diferente.

Michele Ferrero era un devoto de la Virgen de Lourdes. En la entrada de cada una de sus 20 factorías repartidas por 53 países existe una columna con una representación de Nuestra Señora de Lourdes. Cada año, el viejo Michele organizaba una peregrinación al santuario para sus empleados franceses; él mismo acostumbraba a presidir la procesión de antorchas. Y se llevaba consigo a altos directivos del holding. “Entre rosarios y oraciones se discutían las estrategias del grupo”, asegura Giuseppe Rossetto, alcalde de Alba durante diez años.

placeholder El empresario Michele Ferrero en una imagen de archivo (Reuters)

Era reservado como entre los de su clase solo ha sido Amancio Ortega. Llevaba 50 años sin conceder una entrevista y existen muy pocas fotografías suyas. Seguramente, la mayor parte de las que verán estos días fueron tomadas durante el entierro de su primogénito, celebrado en la catedral de Alba, el 29 de abril de 2011 y oficiado por el cardenal Tarsicio Bartone. Las demás que circulan por las redacciones suelen remontarse a cuando tenía 60 años. Tampoco le gustaba publicar sus cuentas al detalle. ¿Han oído eso de que la fórmula exacta de la Coca-Cola solo la conocen unos pocos directivos? Quienes pueden pronunciar en alto la receta de Nutella son menos aún.

Todo un visionario

La tradición era marca de la casa y él un dinosaurio de la vieja economía. La compañía que deja huérfana será dirigida por su segundo hijo, Giacomo, tercero de la saga. Nada de accionistas. Nada de multinacionales extranjeras metiendo la nariz en sus negocios. Le gustaba hablar en un dialecto piamontés difícil de entender para un italiano de nacimiento y dejarse caer por los mercados para conocer los hábitos de los consumidores. Inventó el “juego del tren”: el consejo de administración familiar se reunía ante una gran mesa en forma de U por la que iban pasando las distintas fórmulas y los nuevos productos. Todos opinaban poniéndose en el papel del consumidor final.

placeholder Michele Ferrero junto a su familia en una imagen de 1974 (Gtres)

En el grupo Ferrero trabajan en todo el mundo alrededor de 36.000 empleados. Desde que su padre fundó la empresa, el 14 de mayo de 1946, nunca ha habido una huelga. Y en Italia hay dos cada día. Según el presidente de la compañía, Paolo Fulci, el secreto es el dogma Ferrero: “Prioridad a los valores humanos, sociales y el medio ambiente; servicio a la comunidad. Ferrero y los trabajadores de la empresa están entretejidos como una familia”. Suena a eslogan pero la paz en el holding es un hecho. En noviembre de 1994, el desbordamiento del río Tanaro inundó la principal factoría, en Alba.

Era distinto. No solo por una fortuna de 20.500 millones de euros (primera de Italia y cuarta de Europa), sino porque pertenecía a una clase de empresarios que comenzó a desaparecer cuando él era joven. Sagas como Agnelli, Carnegie o Rockefeller. Aquellos que levantaban industrias, en lugar de especular en código binario. Economía productiva versus economía financiera. Michele Ferrero (Dogliani, 1925 – Montecarlo, 2015) regaló al mundo la Nutella el 20 de abril de 1964. Mejoró un dulce creado por su padre, Pietro Ferrero, que usaba más avellana local frente al carísimo chocolate en una época difícil. La industria Ferrero comenzaba a ser boyante en la Italia de los 50 y se convirtió en líder en la década siguiente. Desde el pequeño pueblo de Alba –cuna del tartufo bianco–, conquistaron Europa a lo largo de los 70, lanzaron en los 80 el huevo Kinder y se convirtieron en referencia mundial durante los 90.

El redactor recomienda