Los magacines se terminaron 'merendando' las tertulias políticas matinales

El primer café, Ruedo ibérico o La mirada crítica. Las privadas le dieron durante muchos años importancia a la tertulia política matinal. Un género televisivo más desenfadado que un telediario pero más prudente que un magacín. Después de décadas, Los desayunos de TVE es el único superviviente. Las privadas se desentendieron de este formato e incluyeron su contenido en las desahogadas mesas redondas de Ana Rosa Quintana y Susanna Griso.

TVE fue pionera en este tipo de contenidos. Bajo la dirección de Ramón Colom, la pública daba a luz en 1994 un programa llamado Los desayunos de Radio 1, ya que se emitía de forma simultánea en radio y televisión. No fue hasta 1997 cuando tuvo sentido propio. Julio César Iglesias fue el primero en ponerse al frente del programa, pero por su silla de presentador se han colocado Javier González Ferrari, Luis Mariñas, Pepa Bueno, Ana Pastor y, en la actualidad, María Casado.

Antena 3 fue la primera en copiar la fórmula. En 1996 nació El primer café. Antonio San José fue su primer presentador y sirvió para dar cobertura a un género que hasta entonces sólo tenía cabida en la televisión pública. Por allí pasaron políticos de la altura de Francisco Álvarez Cascos. Tras su cancelación en 2003, Antena 3 no se rindió y vio necesario que un programa cortado por este patrón siguiese en su parrilla. Y así le siguieron La respuesta (hasta 2004) y Ruedo Ibérico (hasta 2006). Una vez finalizada su etapa, Espejo público se comió este contenido.

Algo muy parecido pasó en Telecinco. La mirada crítica nació como una simple sección de la edición matinal de los Informativos Telecinco en 1998, pero pronto tomó tanto sentido propio que se convirtió en el programa que duró hasta junio de 2009. Por sus filas pasaron Gloria Serra, Vicente Vallés, Montserrat Domínguez, María Teresa Campos, la tristemente fallecida Concha GarcíaCampoyy Yolanda Benítez. Su contenido, como el de Antena 3, terminó incorporándose a El programa de Ana Rosa.

Las privadas ya no cuentan con este género en su parrilla. Aunque siguen ofreciendo un informativo matinal, ya no se nutren de entrevistas o tertulianos y se ciñen a la información pura y dura. Para este tipo de contenidos ya tienen a Quintana y Griso. Sus mesas redondas cuentan con un resumen de prensa y un análisis de la actualidad nacional e internacional con varios tertulianos de carácter más o menos fijo. Además, ambos programas se nutren en numerosas ocasiones del equipo e informativos de sus respetivas cadenas. O, lo que es lo mismo, han tomado el relevo de los matinales que antes tenían sentido propio y que han terminado desapareciendo.

Un sentido contrario ha tomado Mariló Montero en La mañana de La 1. El programa de la pública de despolitizó esta temporada y eliminó este tipo de tertulias para deja todo el peso a Los desayunos y centrándose en la crónica social y los temas de salud. Con esta nueva escaleta, el programa no ha notado una caída de espectadores notable respecto a su anterior temporada. Aunque sigue tercera en el ranking, el espacio de TVE sigue en torno al 9% de cuota de pantalla.