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La modernidad se riega con sidra
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RESTAURANTE

La modernidad se riega con sidra

Salir en Asturias y no probar la sidra es como ir a París y no visitar la Torre Eiffel. La Tierra de Don Pelayo no se

Salir en Asturias y no probar la sidra es como ir a París y no visitar la Torre Eiffel. La Tierra de Don Pelayo no se resiste a prescindir de uno de los pilares fundamentales de su cultura gastronómica y ofrece todo un abanico de posibilidades para disfrutar de los placeres asturianos. Una parada fundamental en el camino hacia el descubrimiento de esta tierra es el centro de Oviedo. Allí, en el casco histórico de la ciudad, se sitúa Los Tres Caracoles, una vinatería-restaurante típicamente asturiana dispuesta a dar a conocer sus manjares tal y como se merecen.

Su afán por conjugar tradición y vanguardia viene dado por la variedad y formas de sus platos. Al estar dividido en dos zonas, es posible calentar motores tomando un vino o un aperitivo e incluso comer de forma informal a base de medias raciones en la barra y después pasar, o hacerlo directamente, al comedor. Los ‘espirituosos’ adquieren tanto protagonismo como los guisos, convirtiéndose ambos en los dos actores fundamentales de la función.

Álex Sampedro es el artífice de la carta de Los Tres Caracoles. El jefe de cocina y también asesor del restaurante madrileño Guts Fusión ha querido dar un toque creativo al arte tradicional proponiendo una cocina moderna, creativa y de mercado. Es posible ofrecer recetas de toda la vida con pequeños giros innovadores que invoquen nuevos sabores, texturas e impresiones. Con cada cambio de carta, el chef tira de ingenio e imaginación para engendrar nuevos platos, o como él mismo diría, “nuevas experiencias”. Platos como el mero asado con salsa de oricios y hierbabuena o la ensalada de verduras frescas, setas de temporada y aceite de calabaza renuevan constantemente la oferta culinaria de Los Tres Caracoles.

Si en la época veraniega era el tartar de atún rojo de Almadraba con sopa fría de tomates asados y gelatina de soja una de las sensaciones de la temporada, ahora, con el frío invernal a la vuelta de la esquina, son los platos de cuchara los que cobran protagonismo. Qué mejor lugar que Asturias para degustar unas auténticas lentejas estofadas con panceta, un guiso de patatas con langostinos y, cómo no, unas fabes con almejas.

Además de las nuevas incorporaciones en la carta, el otro punto original que Sampedro ha ‘inventado’ son las “jornadas del mercado”. Un producto de temporada será el ‘rey’ del restaurante durante una semana, presentándose tanto en la mesa como en la barra en varias modalidades y pudiendo ser acompañado por el vino o la copa con el que mejor combine. Pero si lo que se quiere es hacer un recorrido general por la carta, Los Tres Caracoles pone a disposición del comensal un Menú Gastronómico en el que se combinan platos clásicos con las últimas innovaciones a un precio de 39 euros.

Las mejores sidras y una excelente selección de vinos también se encuentran aquí. Las más de 300 referencias incluyen vinos franceses, alemanes, austriacos e italianos, entre otros, sin olvidar los blancos, rosados y tintos de hasta 21 denominaciones de origen españolas. Aroa Gutiérrez, esposa de Sampedro, ha cuidado hasta el más mínimo detalle la carta de vinos para hacerla lo más dinámica y completa posible. Tal es su pasión que ha ideado una nueva iniciativa apta tanto para entendidos como para no iniciados. Se trata de la posibilidad de que el cliente que haya pedido una botella y no la haya terminado pueda dejarla en un depósito con su nombre para seguir disfrutándola en su próxima visita. Eso es lo que se llama asegurarse la clientela.

Dirección: Jovellanos, 25. Oviedo.

Teléfono: 985 207 789

Abre todos los días de 13.30 a 16.00 y de 20.30 a 24.00, excepto los domingos.

Salir en Asturias y no probar la sidra es como ir a París y no visitar la Torre Eiffel. La Tierra de Don Pelayo no se resiste a prescindir de uno de los pilares fundamentales de su cultura gastronómica y ofrece todo un abanico de posibilidades para disfrutar de los placeres asturianos. Una parada fundamental en el camino hacia el descubrimiento de esta tierra es el centro de Oviedo. Allí, en el casco histórico de la ciudad, se sitúa Los Tres Caracoles, una vinatería-restaurante típicamente asturiana dispuesta a dar a conocer sus manjares tal y como se merecen.