La mujer acapara todas las miradas en Milán

La tercera jornada de la Milano Donna Moda se cerró el lunes con un conjunto de propuestas atrevidas e interesantes en la que los diseñadores más conocidos y afamados fueron Giorgio Armani, quién el día anterior apadrinó la colección de su marca Emporio Armani con precios más asequibles, Alberta Ferreti o Missoni.

 

Como no podía ser menos el diseñador italiano Giorgio Armani, considerado junto a Valentino y Emilio Pucci uno de los grandes diseñadores italianos del siglo, acaparó la mayor parte de las miradas. En su última colección abandonó su sobriedad tradicional al decantarse por una mujer romántica sin perder ni su fuerza ni su elegancia.

El diseñador italiano, que al cierre de su desfile, aseguró que ha vuelto a dar más importancia a la mujer como tal por encima de las tendencias, apostó para la ocasión por la ligereza de los tejidos y el movimiento. Para el día, Armani se mantuvo fiel a su traje pantalón aunque dejó espacio para las faldas lisas, mientras que para la noche el vestido se convierte en la pieza imprescindible de cualquier guardarropa. Vestidos drapeados con escote palabra de honor y faldas vaporosas dejan traslucir estampados de colores pastel que quedan lejos de cualquier estridencia o se adornan con cristales Swarosky.

Para ocasiones más informales deja que los vestidos terminen en la rodilla evocando una sencilla túnica, cuyo único complemento es un ‘foulard’ de gasa, mientras que las dos líneas más rectas se acompañan de chaquetas forradas en chifón estrechas en los hombros que se ensanchan a la altura de la cadera.

Punto y aparte

El mismo día, pero no a la misma hora, hicieron acto de aparición los diseños de Ottavio y Rosita Missoni, firma italiana creada en 1953 por Tai y Rosita Missoni especializada en investigar las múltiples posibilidades del género de punto y en la utilización de una amplísima gama de combinación. Todo ello con la intención de conseguir que dicho material se rodeara de la quintaesencia y el glamour desde los años sesenta.

Las formas geométricas inundaron estampados y prendas a las que se incorporó cinturones elásticos para realzar la cintura que de otro modo pasaría desapercibida bajo los blusones y los vestidos vaporosos. Los colores protagonistas serán el amarillo y el verde con algunas incursiones de los metalizados y el gris. Para la noche se decantan por vestidos largos, adornados con pedrería y de líneas rectas y que alternan los pronunciados escotes en forma de V o de tipo barco.

Gabardinas para la lluvia

 

En 1865 el creador Thomas Burberry se hizo famoso fuera de su Inglaterra natal al realizar una gabardina, trinchera o burberry, ideada que sirviera al Ejército inglés durante la guerra de los Borres (1899-1902). Tal fue la acogida que hoy casi nadie puede decir que no haya llevado, al menos una vez en su vida, dicho artículo.

En su desembarco en Italia la firma Burberry Prorsum ha lanzado chaquetas y gabardinas ligeras, capas, pantalones de talle alto y vestidos cortos. Los colores elegidos se mueven entre las diferentes tonalidades del gris así como el verde, azul o lila. Por su parte los materiales empleados combinan el algodón con la gasa, la seda o el lino.

Todos tienen cabida

Otros diseñadores presentes en esta edición, quizá con menos renombre en el mundo de la moda, sobre todo, para los menos expertos en la materia fueron Ermanno Scervino y Enio Capasa para la marca C’N’C. El primero se centró en la versatilidad de una mujer que puede escoger tanto piezas de corte clásico como la combinación de atrevidos tops con diminutos shorts, que encontrarán en los zapatos altos su mejor complemento y aliado.

Capasa llevó a la pasarela milanesa su línea joven, caracterizada por el uso de gasas tecnológicas y transparencias con prendas que se sobreponen para dar un aire transgresor en un absoluto negro. La jornada cerraría con los colores pastel y las prendas drapeadas y con movimiento de Byblos.