Mirada rejuvenecida, rostro perfecto

En el mundo profesional actual condiciona de manera negativa aparentar a través de la mirada un aspecto cansado, triste o decaído. Un problema que se agrava más en personas predispuestas a un envejecimiento acelerado de los párpados. La cirugía refractiva (para prescindir de gafas y lentillas) ha devuelto también protagonismo a la mirada. Hoy, un buen retoque en los ojos luce más que cualquier otro ‘arreglillo’ facial. Las técnicas estéticas y quirúrgicas afinan la puntería correctora y reparadora y ofrecen soluciones de diferente calibre y duración para los párpados, las bolsas y las ojeras. 

El Doctor Rubén García-Guilarte, antes de describir cuáles son las mejores técnicas médicas-estéticas y quirúrgicas para el rejuvenecimiento orbitario, aclara a Vanitatis que “se ha pasado de valorar los párpados de manera aislada a valorar el ojo y las estructuras que lo rodean de una forma global: la órbita que incluye el ojo propiamente dicho, la musculatura, la piel palpebral, las bolsas de grasa y los ligamentos que sujetan todas las estructuras anteriores”.

Para las arrugas: las patas de gallo se corrigen inyectando la conocida toxina botulínica a distintos niveles del músculo y en concentraciones diferentes (los resultados duran unos seis meses).

Por su parte, las ojeras se corrigen mediante una técnica exclusiva conocida como Lamle, que utiliza ácido hialurónico muy poco reticulado que se va infiltrando con una aguja fina en el borde de las ojeras, en la zona de inserción de las bolsas. El tratamiento es rápido, seguro y goza de éxito tanto en Estados Unidos como en nuestro país. En Madrid, en la consulta del García Guilarte, los resultados son inmediatos y duran casi dos años.