David Rodríguez Caballero, el artista que devolvió al aluminio su nobleza

Casi un siglo después de que Federico García Lorca encontrara en la Gran Manzana su fuente de inspiración, David Rodríguez Caballero ha elegido, siguiendo los pasos del poeta granadino, el neoyorquino barrio de Tribeca para desarrollar sus ideas y trabajar sus materiales fetiches: los vinilos y los aluminios.

Amante del arte desde su más tierna infancia, David se ha convertido, pese a su juventud, en uno de los escultores más importantes del panorama nacional gracias a su trabajo lleno de fuerza y creatividad. Desde que entrara en la Escuela de Bellas Artes, este pamplonés ha ido evolucionando como artista hasta llegar a convertirse en uno de los miembros de la prestigiosa galería de Marlborough, integrada en su día por gente como Francis Bacon, Botero o Manolo Valdés.

En 1998, David viajó a Nueva York, lugar donde descubrió materiales que no pertenecían a la tradición pictórica, pero que se convirtieron en sus nuevas fuentes de inspiración. "Me gusta investigar y alterar", confiesa el artista en conversaciones con Vanitatis.

Relegado por muchos artistas por su frialdad y su dureza, el aluminio renace en las manos de este escultor español que, moldeando y coloreando sus láminas, las transforma en auténticas obras de arte. De hecho, no es raro verlas en las galerías de arte más famosas de Alemania, Italia, Corea del Sur o Rusia.

A la hora de ponerse manos a la obra, David prefiere dar rienda suelta a sus sentimientos y emociones y trabajar sin una idea fija en la cabeza: “Mi trabajo en es un proceso caótico, de repente desarrollo. Me gusta ir creando un lenguaje propio, sin evocaciones a referentes reales”. Esta técnica permite al artista poder trabajar a la vez con diferentes esculturas e ir aportando al diseño elementos novedosos ausentes al principio del proceso de creación.

Sus próximas exposiciones

David Rodríguez Caballero ha encontrado tanto en Madrid como en Nueva York la inspiración necesaria para preparar y moldear su gran debut en solitario en la ciudad americana, donde expondrá en la galería Marlborough de Chelsea a principios de año. 

Antes de enfrentarse a este gran reto en Nueva York, David estrena el 19 de noviembre una muestra en el Museo Würth La Rioja, donde se podrán ver sus esculturas monumentales y relieves de pared, sus vinilos y los bocetos y dibujos utilizados en sus procesos de creación.