El disfraz osezno que triunfa en Silicon Valley

Seguro que pensabas que el look Silicon Valley era muy concreto. Gafas de Warby Parker (porque Hollywood nos ha enseñado que la gente lista lleva, necesariamente, lentes), chaquetas con capucha, vaqueros, deportivas y una bicicleta fixie como transporte. Es decir: te imaginas a un icono normcore cualquiera. Pero, querido lector sabelotodo, usted se equivoca. El look que ahora arrasa no solo en Sillicon Valley, sino en las empresas techies, es el disfraz de oso. De hecho, BloombergBusinessweek habla del Griz Coat, que es como se llama la moda entre los millennials. Ahora que llega el frío, ¿se anima, querido y osado caballero, a hacerse con este abrigo con cabeza osezna y guantes que simulan las patas de un oso?

La idea nace de las mentes de los gemelos Karl y Hans Reichtetter, que tras graduarse intentaron coordinar su disfraz de Halloween. Quisieron vestirse de osos, pero no encontraron disfraces realistas y crearon dos prototipos con elementos que provenían de tiendas de taxidermia. Estos diseños, en principio poco funcionales, se convirtieron en los protagonistas de la fiesta. Fue entonces cuando estos avispados hermanos vieron que había mercado para este abrigo polar. Decidieron pedir dinero a través de Kirckstarter, una plataforma online para recaudar fondos para proyectos creativos, y consiguieron 29.000 dólares en tres semanas. Su siguiente proyecto, por cierto, vuelve a financiarse a través de esta web: el Griz Rug, una alfombra con forma de oso y cabeza desmontable.

Pero volvamos al Griz Coat. Los gemelos optaron por producir el diseño definitivo en América para controlar la producción. El resultado es un abrigo que incluye todo tipo de detalles y que se vende en una talla única, aunque se está trabajando en modelos XL. Tanto cuidado por los detalles es el que explica que se venda por 200 dólares, un precio caro para un disfraz. Pero, como ellos mismos señalan en su web, "no es un disfraz: es un modo de vida". Eso sí: si te animas a hacerte con este traje peludo, has de saber que los ladrones se lo rifan. Un cliente les mandó un email en el que explicaba que le habían robado su traje del coche. Sin embargo, dejaron el portátil que estaba al lado, como si de un objeto menor se tratara.

El pasado mes de octubre, gracias a Halloween, se vendieron 500 abrigos. Debido al 'efecto Halloween', se estiman ventas similares en noviembre y diciembre. Además, en determinados círculos, no es necesaria una fiesta especial para llevar el Griz Coat. Karl Reichtetter trabaja en Apple y asegura que no es extraño ver a trabajadores de la empresa pasear con su traje furry. En una conferencia tecnológica, afirma que dos grupos de trabajadores diferentes llevaban sus trajes. Y al igual que ha pasado con los onesie, esos monos pijameros que popularizó la modelo Cara Delevingne, los Griz Coats se han convertido en el uniforme de festivales musicales como Coachella. Sus fundadores creen que el éxito de estos diseños reside en que mientras la mayoría de empresas quieren vender al 90% de los consumidores, ellos se centran en el 10% restante. Y sí: ese porcentaje pequeño está plagado de jóvenes, techies, festivaleros, nerds y fiesteros.