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Viva la nostalgia: siete fetiches para hipsters convencidos
  1. Estilo

Viva la nostalgia: siete fetiches para hipsters convencidos

El bigote bien mimadito, el giradiscos sin florituras y la cámara analógica de cartón son algunas de las cosas que vuelven locos a los más antiguos de los modernos

Lo 'hipster' lucha por sobrevivir mientras da síntomas de agotamiento

¿Agotada la tendencia 'hipster'?

Lo 'hipster'lucha por sobrevivir mientras da síntomas de agotamiento. Desde que un fenómeno global despunta hasta que entra en decadencia podemos encontrar síntomas que indican que ha superado el cénit de su desarrollo. Desde el momento en que en comedias costumbristas aparecen 'hipsters' o marcas de coches sacan barbudos en sus anuncios como si no hubiera un mañana, podemos intuir que lo que era transgresor e innovador está dejando de serlo. Aun así, y mientras triunfa una nueva etiqueta generacional, sigue habiendo objetos que te definirán como alguien que va un paso por delante de la masa.

Mimar el bigote

Bien sabido es que la exuberancia en el vello facial es cosa 'hipster' a rabiar. Y cualquier hombre que se haya dejado barba sabe de las dificultades para mantener esa selva en buen estado higiénico y estético. La marca barcelonesa Macho Beard Co. (“Somos rockeros, somos moteros”, afirman los barbudos emprendedores como declaración de principios) ha desarrollado una línea cosmética especialmente diseñada para el cuidado de bigotes y barbas. Mezclas creadas con ingredientes naturales, aceites esenciales y vegetales de la más alta calidad y concentración que admite la piel, y su misteriosa e inimitable Fórmula Macho. Uno de sus productos estrella es el Aceite para Barba Crecimiento1977, aromatizado con romero y que promete favorecer el factor de crecimiento de tu barba.

Giradiscos sin florituras

Reivindicar los vinilos como formato favorito de reproducción es definitivamente 'hipster'. Si no se conserva un clásico en casa, habrá que optar por adquirir uno nuevo. El problema viene cuando nos damos cuenta de que muchos de los de fabricación reciente incluyen todo un arsenal de funciones que resultan útiles, pero están muy alejadas del minimalismo de rigor que reclama lo 'hipster'. La marca U-Turn Audio ha creado un modelo, The Orbit, que prescinde de conexión USB, wifi y cualquier otra función que pueda resultar superflua. Sencillo y robusto, el modelo más básico, a la venta por unos 170 euros, lleva transmisión por correa, cartucho Audio-Technica y una plataforma de baja resonancia. Y entre sus méritos subjetivos también se cuenta el hecho de que no está fabricado en Asia, sino en Boston (EEUU).

La cafetera de filtro que más lo peta

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Hasta en el café se expresa la peculiar idiosincrasia 'hipster', amante de la sencillez y lo manual por encima de los tecnológico. La cafetera Chemex la inventó un químico alemán llamado Peter Schlumbohm en 1941, pero ahora se fabrica en Estados Unidos, y hasta está expuesta en el MOMA como ejemplo de diseño industrial contemporáneo. Es una especie de matraz con un cuello cónico sobre el que se coloca un filtro de papel especial. Sobre este se coloca el café molido (más grueso que en una cafetera 'espresso' común) y se vierte agua caliente encima (a una temperatura de entre 90 y 95º). Un proceso sencillo que deja un café cristalino, sin sedimentos y filtrado a la velocidad precisa.

Zapatos justos

Un cuarto y mitad de conciencia social y de consumo responsable es imprescindible en la receta para convertirse en el 'hipster'perfecto. Y eso va de la cabeza a los pies. Unos zapatos sostenibles (y que te sostengan con estilo) tienen que formar parte de su armario. SoleRebels es una marca de zapatos elaborados artesanalmente en Etiopía. La marca garantiza que sus trabajadores reciben salarios que cuadruplican los mínimos legales en el país africano, y que además reciben atención médica, disponen de transporte gratuito hasta su trabajo y no están sometidos a prácticas abusivas. Además emplean materiales reciclados y financian programas para preservar la identidad cultural de las comunidades donde producen sus productos. Y, menos mal, los zapatos son bonitos y ofrecen diseños tanto masculinos como femeninos.

Una cámara analógica de cartón

Tardarás unos treinta minutos en montarla, pero tendrás el placer de haberlo hecho con tus manitas, como buen 'maker': sácala del cartón, dobla las esquinas, ponle las chinchetas, pega las pegatinas y ajusta las pequeñas piezas, usa la cinta adhesiva negra para que no entre nada de luz, pon el carrete, ciérrala muy bieny prepárate para poder disparar fotos que no precisarán un filtro de Instagram porque ya están preparadas para ser lo más. Se trata de Viddy, una cámara que entusiasma a los modernos que ya están hartos de la lomografía. No podrás compartir las fotos en redes sociales con un golpe de índice, pero ¿qué es eso al lado de los pequeños placeres analógicos?

Casio F91W, entre lo retro y lo auténtico

Llevar reloj hoy en día es ya una declaración de principios, normalmente un gesto de ostentación más que una decisión funcional. Entre los 'hipsters' no se estilan los relojes suizos de oro macizo ni con precios de cuatro cifras, sino piezas como el emblemático Casio F91W. Posee una cualidad atemporal y su reducido precio (alrededor de 10 euros), hay que sumarle otro factor que chifla a los 'hipsters': el minimalismo. Su diseño se ha mantenido invariable durante más de 20 años, y entre sus prestaciones ofrece luz, cronómetro, alarma, señal horaria y resistencia al agua. La correa contiene resina sintética, un material que le otorga tanto resistencia como flexibilidad, y su peso es de 21 gramos, ni más ni menos. También es sostenible gracias a su bajo consumo: su batería dura hasta cinco años. Ha sido visto en la muñeca de Barack Obama, aunque en su leyenda negra también consta el hecho de que algunos yihadistas lo han usado como temporizador para artefactos explosivos artesanales.

Escribir como antes (o casi)

La nostalgia por las nobles creaciones de la era industrial, libres de la maldita obsolescencia programada, provocan escalofríos de placer en las axilas de cualquier 'hipster' de pro. Claro que a la comodidad de un iPad nadie la hace ascos. Conciliar ambas experiencias es la razón de ser de una tendencia que consiste en reciclar máquinas de escribir mecánicas y hacerlas compatibles con 'tablets' u ordenadores contemporáneos. Un extraño híbrido que, sin embargo, resulta tan ocurrente como romántico.

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Lo 'hipster' lucha por sobrevivir mientras da síntomas de agotamiento

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