El juego seductor de la lencería triunfa en Londres

En el erotismo, sugerir siempre ha servido como mejor acicate que mostrar directamente. El cuerpo desnudo, liberado, resulta demasiado obvio ante los ojos que buscan encender su pasión mientras que del otro modo nuestra imaginación puede echar a volar preguntándose cómo será la piel que se esconde tras las telas. La lencería femenina apela hoy a esta búsqueda de la belleza y la sensualidad, aunque no siempre fue así. A analizar la evolución de la ropa interior está dedicada la exposición Undercover – The evolution of underwear que el Fashion and Textile Museum de Londres acoge hasta el 27 de septiembre de este año.

 

Durante siglos el cuerpo femenino fue manipulado, sometido e incluso cincelado por la ropa interior, que en muchos casos servía para perfilar y dar forma a la figura de la mujer, aunque el salto hacia la ropa interior moderna se dio en 1915 con la invención del primer sujetador patentado. La exposición londinense arranca en este punto y llega hasta los últimos avances, como la lencería anticelulítica o la que sirve para reafirmar el contorno del busto.

La lencería femenina ha evolucionado al mismo ritmo que el papel que ellas han tenido en la sociedad. Del ‘escóndelo’ al ‘levántalo’, de la mujer pasiva de comienzos del siglo XX a la imagen contemporánea de la femineidad, la exposición recorre con detalle este camino: “La muestra enseña la evolución durante el último siglo abarcando desde inicio de la Primera Guerra Mundial hasta el papel cambiante de la mujer en la sociedad desde un elemento funcional hasta un objeto de belleza”, explica Alison McCann, comisaria de la exposición.

La variedad de estilos y diseños surge del amplio número de colecciones –tanto públicas como privadas- que han donado sus piezas al museo. Elle MacPherson Intimates, Triumph, La Perla, Stella McCartney, Christian Dior o Wonderbra se encuentran entre las firmas presentes. La más orgullosa de su presencia, McPherson, que asegura que se siente “honrada” por poder participar con sus diseños. Las piezas más originales y diferentes también tienen espacio, desde el primer corsé de viuda alegre inspirado por la película homónima protagonizada por Lana Turner hasta los de la reina del del burlesque británico, Immodesty Blaize.