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Máxima, Kate o Mette-Marit: los peores looks de las 'royals' en 2015

Núria Tiburcio

Duquesa de Cambridge — Duquesa de Cambridge
La duquesa de Cambridge, súmmum de la elegancia y del saber vestir, cometía un gran error de estilismo. Fue en una cena de gala de la asociación 100 Women in Hedge Funds. La esposa del príncipe Guillermo estrenó un vestido floreado de la firma Erdem cuya tela bien podría pertenecer a las cortinas de la casa de la pradera. Aparte de que el estampado ya era difícil de mirar, el frunce en la parte inferior de la falda acababa de rematar este estilismo imposible. Por si eso fuera poco, el vestido tenía unas costuras extrañas en la zona del pecho. Si la prenda es poco bonita -digámoslo así-, su precio lo es mucho menos. Y es que el vestido en cuestión cuesta la friolera de 3.395 euros, un dinero que la duquesa ha tirado directamente a la basura, pues dudamos que vuelva a apostar por él para un nuevo acto tras las múltiples críticas que ha cosechado.

Máxima de Holanda — Máxima de Holanda
Para la entrega del premio Prix de Rome, la argentina se decantó por un estilismo indescifrable con el que no estaba nada favorecida. Máxima estrenó un vestido con estampado geométrico en tonos azules, amarillos, marrones, negros y rojos. Una explosión de color injustificable que dejó la elegancia de la esposa de Guillermo Alejandro por los suelos. Y es que acostumbrados a sus 'looks' perfectos, este atuendo nos parece, cuando menos, olvidable. El vestido en cuestión pertenece a las diseñadoras holandesas Spijkers en Spijkers. Para acabar de rematar este indescifrable 'look', la reina Máxima se engalanó con complementos en negro. El resto del atuendo lo formaban unos salones negros, una cartera de mano de la firma Careland Copenhagen, un tocado al estilo 'pillbox' y unos pendientes largos que pertenecen a su joyero privado.

Letizia de España — Letizia de España
Doña Letizia quiso innovar, pero pecó de informal en el Forum Impulsa y obtuvo un 'look' desastroso. La Reina recuperó de su armario unos pantalones holgados con estampado de inspiración maya en blanco y negro de Boss Orange, valorados en 149,95 euros, que estrenó en marzo de 2014 y que ha llevado en numerosas ocasiones. Lo combinó con top blanco y 'blazer' negra. Hasta ahí todo bien. El error lo tuvo al elegir los complementos. Y es que la esposa de Felipe VI se decantó por la cartera de mano de estampado étnico de 16 euros que lució por primera vez durante su viaje de cooperación a Honduras. La combinación del estampado del pantalón con el del bolso era pésima. Asimismo, las sandalias de ante tipo romanas de Magrit, que ya había llevado en mayo de 2010 y que desde entonces no le habíamos vuelto a ver, acababan de arruinar el atuendo real.

Mette-Marit de Noruega — Mette-Marit de Noruega
Al igual que nos ocurre con la Reina Letizia, hay tantos 'looks' decadentes donde elegir que nos ha sido difícil decantarnos solo por uno. Pero finalmente hemos optado por este que lució en su asistencia a la celebración del 50º aniversario de la Cruz Roja. La princesa heredera de Noruega dio una perfecta lección de cómo destrozar un precioso abrigo de Valentino en tres simples pasos. Primero se puso debajo una falda azul y un jersey de lycra de cuello alto que no quedaba nada bien con los volantes que lleva la prenda de Valentino en la parte superior. Después se calzó unas botas de agua marrones de la firma británica Aigle. Y el punto final lo dio con una trenza despeinada.

Victoria de Suecia — Victoria de Suecia
Por muy Emilio Pucci que sea, este vestido que lució la hija pequeña de los reyes suecos nos parece muy desagrable. La princesa Victoria eligió esta creación del diseñadora italiano para celebrar el décimo aniversario del Instituto Karolinska. El estampado en blanco, rosa, negro y naranja nos deja horrorizados. Asimismo, hay que remarcar que el abrigo de seda fucsia está de lo más arrugado. Cabe destacar que, aparte de que el conjunto es difícil de mirar, tampoco le hace nada de justicia a la princesa, y es que parece que tenga un cuerpo sin curvas. Cuestión aparte es su inseparable coleta, que esta vez la llevaba algo despeinada. Lo único salvable es su bolso negro de Valentino.

Matilde de Bélgica — Matilde de Bélgica
La reina de los belgas siempre suele ser una mujer discreta y clásica en lo que se refiere a cuestiones de estilo, por ello ese día nos sorprendió -y para mal- cuando eligió este conjunto para su asistencia al tradicional concierto de otoño en el Palacio Real de Bruselas. Aparte de que el color del vestido no nos parece nada bonito, el escote lo acaba de rematar, sobre todo esa especie de plumas colgadas al cuello. Aunque la esposa de Felipe intentó contrarrestar su vestuario con complementos bastante sencillos y con unas impresionantes joyas de oro blanco y diamantes, no pudo hacer nada para obrar el milagro.

Mary de Dinamarca — Mary de Dinamarca
La australiana es, junto a la reina Máxima, una de las pocas damas de la realeza que arriesga a la hora de vestir y en algunas ocasiones eso le ha jugado una mala pasada. En la imagen, tomada en mayo durante su visita a Alemania, la vemos luciendo por primera vez un mono de la firma danesa Ole Yde que no sabemos por dónde cogerlo. Y es que ni la forma vaporosa ni el estampado nos acaban de convencer, ya que no favorece para nada a la esposa del príncipe Federico. ¡Vamos Mary, tú tienes 'looks' mucho mejores!

Charlène de Mónaco — Charlène de Mónaco
La esposa del príncipe Alberto no ha tenido demasiadas apariciones públicas durante este año, pero esta es la peor. Para su asistencia al premio de Formula 1, la princesa Charlène estrenó un mono blanco de Akris que no la favorecía para nada. Y es que esos pliegues en el bajo y las transparencias en el escote son un auténtico horror. Esperamos que no lo vuelve a lucir nunca más.

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24/12/2015 05:00

El año 2015 llega a su fin y toca hacer repaso de los 'looks' peores del año. Durante estos doce meses, son muchas las damas de la realeza que han cometido errores garrafales a la hora de elegir modelito. Hoy en Vanitatis te proponemos un viaje por los peores estilismos de las 'royals' de Europa, desde la Reina Letizia hasta la princesa Mette-Marit.

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