Chelo García Cortés aún jura en arameo cuando recuerda lo que le ocurrió el pasado fin de semana. El sábado cuando se disponía a comprar unas cápsulas de café a una tienda no imaginaba que a la salida se encontraría con una desagradable sorpresa. Alguien, no se sabe si intencionadamente o no, había destrozado el espejo retrovisor de su todoterreno y la colaboradora de 'Sálvame' no podía disimular su enfado.
Ya dentro del vehículo, Chelo no se decidía a arrancar mientras seguía refunfuñando y hablando con su maltrecho espejo.
La colaboradora cree que desde que sale en 'Sálvame' no despierta demasiadas simpatías y podría haber sido un 'hater' el que habría roto su añorado espejo.