Es noticia
Menú
Los veranos de 'currante' de la hija de Pedro Jota y Ágatha Ruiz de la Prada
  1. Noticias
NOTICIAS

Los veranos de 'currante' de la hija de Pedro Jota y Ágatha Ruiz de la Prada

Cósima Ramírez Ruiz de la Prada encarna el prototipo de niña mimada y con toda la economía familiar a su disposición. Estudia en una de las

Cósima Ramírez Ruiz de la Prada encarna el prototipo de niña mimada y con toda la economía familiar a su disposición. Estudia en una de las mejores universidades de Estados Unidos pero, cada verano, la hija del influyente director de El Mundo y la poliédrica diseñadora Ágatha Ruiz de la Prada intenta trabajar para conseguir, por sí misma, sus propios ahorros. De hecho, este verano, tal y como ha podido saber Vanitatis, ha sido contratada eventualmente en una pequeña editorial en París durante unos meses. Según ha contado a sus amigos, ha aprendido mucho y, lejos de disfrutar de las bondades de las Baleares como sí han hecho otros cachorros de la vieja guardia de 'influyentes', ha optado por quedarse en la capital francesa. Salvo cuando acompañó a su madre a una boda de aristócratas celebrada en Italia.

Pero, Cósima, que posee el 18% del holding constituido entre su padre y su madre, siempre ha querido demostrar a su familia su intención de ganarse el pan. Por eso, lejos de echarse a la buena vida, hace dos veranos la benjamina de Pedro Jota y Ágatha, que no están casados, también trabajó en una céntrica tienda Pull and Bear de Madrid, perteneciente al imperio textil de Amancio Ortega, donde pasó totalmente desapercibida. Su hermano Tristán, que despierta menos interés en los medios que ella, ha desarrollado su actividad profesional en las oficinas en Madrid de Inditex. A pesar de sus curritos de verano, en jerga vulgar, Cósima sigue volcada en sus estudios allende los mares.

La heredera, quien ostentará de su madre el marquesado de Castelldosrius y la baronía de Santa Pau, se encuentra a punto de finalizar sus estudios de Historia, aunque realmente lo que le apasiona es la política, tal y como le contó hace unos años a Eduardo Martínez Rico, biógrafo de su padre. “No me importaría ser presidenta del Gobierno”, le espetó. A su vez, matizó que no le faltaba ambición para intentarlo. Cósima estudia en la Universidad de Brown, ubicada en Providence, en el Estado de Rhode Island, donde lo hace también Rafael Cebrián Aranda, hijo de la experiodista Teresa Aranda y de Juan Luis Cebrián, consejero delegado del grupo Prisa. Ambos son amigos, a pesar de que sus padres no se puedan ni ver. A éste se le relacionó recientemente con la actriz Emma Watson. Ella destaca por las vistosas creaciones de su madre, que luce a menudo.

Cósima abandonó el anonimato en el 2007, cuando participó en el baile de debutantes del Hotel Crillon de París, en el que participaban otras 24 jóvenes de apellido ilustre. La joven, que se decantó por un vestido de Lacroix, el diseñador fetiche de la infanta Elena, compartió estrellato en el Crillon con gente tan principal como las nietas del senador Kennedy o la hija del cantante Phil Collins. Y desde entonces se ha atrevido a posar en revistas, como por ejemplo Vanidad, donde ha hablado de sus planes de futuro. Sea como sea, Cósima no quiere perder contacto con la realidad. 

Cósima Ramírez Ruiz de la Prada encarna el prototipo de niña mimada y con toda la economía familiar a su disposición. Estudia en una de las mejores universidades de Estados Unidos pero, cada verano, la hija del influyente director de El Mundo y la poliédrica diseñadora Ágatha Ruiz de la Prada intenta trabajar para conseguir, por sí misma, sus propios ahorros. De hecho, este verano, tal y como ha podido saber Vanitatis, ha sido contratada eventualmente en una pequeña editorial en París durante unos meses. Según ha contado a sus amigos, ha aprendido mucho y, lejos de disfrutar de las bondades de las Baleares como sí han hecho otros cachorros de la vieja guardia de 'influyentes', ha optado por quedarse en la capital francesa. Salvo cuando acompañó a su madre a una boda de aristócratas celebrada en Italia.