Eugenia Martínez de Irujo salda sus 25.000 euros de deuda con la justicia

Eugenia Martínez de Irujo se ha visto entre la espada y la pared. Ante la amenaza de ver embargadas sus cuentas o parte de su patrimonio, ha decidido depositar los 25.000 euros que se le reclamaban en concepto de costas, según han confirmado fuentes judiciales a Vanitatis, tras haber perdido la querella presentada contra el periodista Diego Arrabal.

De nada le sirvieron a la pequeña del clan Alba los avisos y diligencias enviadas desde el juzgado reclamándole la deuda. Fue necesario que una comisión judicial se personase en su domicilio con el fin de notificarle el embargo, para que Eugenia Martínez de Irujo reaccionase e ingresase las costas de una larga batalla judicial que ha durado ocho años.

La negativa de la duquesa de Montoro podría haber puesto en riesgo parte de la herencia que la duquesa de Alba decidió donar a su hija en vida en julio de 2011. Sa Aufabaguera, la casa de verano de Ibiza en la que es frecuente ver a doña Cayetana pasar las vacaciones estivales, y la finca la Pizana, un cortijo de 600 hectáreas situado en La Gerena (Sevilla), que la Duquesa le regaló cuando se casó con Francisco Rivera, podrían haber sido embargadas si Eugenia no hubiese pagado los 12.874,87 euros correspondientes a las costas del primer juicio, y los 12.150,91 por las costas del recurso en la Audiencia.

Como ya adelantó este portal, la hija de la Duquesa de Alba emprendió una batalla legal en el año 2004 contra el periodista Diego Arrabal por un supuesto delito de descubrimiento y revelación de secretos, tras ver publicadas unas declaraciones suyas en la revista Diez Minutos, en las que la pequeña de los Alba confesaba su malestar por el romance que mantenía en ese momento su exmarido, Francisco Rivera, con Carla Goyanes. De nada le sirvieron sus argumentos ante el juzgado de lo penal número 30 de Madrid, ni en su recurso ante la audiencia provincial, pues Eugenia era condenada finalmente a pagar las costas de los dos procesos.

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A pesar de los ocho años batallando en los tribunales, este no ha sido el mayor problema judicial al que ha tenido que hacer frente Eugenia Martínez de Irujo. Si hay algo que realmente le preocupa es el proceso que le enfrenta a su exmarido por la custodia de su hija. De momento no hay fecha para el inicio del juicio, todo depende del juzgado de familia. A la espera de ese día, en el que se decidirá el futuro de la nieta de la doña Cayetana, el extorero ha movido ficha y le ha contado a su círculo más intimo que desea hablar con la duquesa de Alba para explicarle que su finalidad es hacer feliz a Cayetana y cumplir el sueño de una niña que quiere vivir junto a su padre, y no el de hacerle daño a Eugenia Martínez de Irujo.