Manolo Santana se casa por cuarta vez a los 75 años

Manolo Santana se casará después del verano con su actual pareja Claudia Rodríguez, con la que mantiene una relación desde hace un lustro. Será el cuarto matrimonio para el exjugador de tenis, que a sus 75 años dará el ‘sí, quiero’ a una brasileña divorciada dos décadas más joven que él. La pareja ha confirmado la noticia en conversación con Vanitatis, aunque aseguran que aún les quedan muchos detalles por concretar.

Las alarmas saltaron el pasado fin de semana cuando surgieron rumores que apuntaban a una posible boda repentina. Se decía que se habían casado en Roma en una ceremonia civil y privada en el consulado español y a la que no había acudido ninguno de sus cinco hijos. No ha sido así. Efectivamente se encuentran en la capital de Italia disfrutando del Masters 1000, pero la propia Claudia confirma a este diario desde allí que no entiende de dónde ha salido la información. No era la primera vez que sucedía algo parecido, pues ya les casó una revista hace alrededor de dos años, probablemente, creen los protagonistas, porque Santana siempre se refiere a su pareja como “mi mujer”.

Lo será definitivamente en unos meses. Se convertirá concretamente en su cuarta esposa. Antes estuvo casado con María Fernanda González-Dopeso, Mila Ximénez y Otti Glanzelius. En el caso de Claudia, se quedó viuda hace muchos años y Santana será su segundo marido. “Ya nos han casado en varias ocasiones. Seguramente el rumor salió del Madrid Open, donde a Manolo le preguntaron por el tema”, dice ella. “Lo que puedo asegurar es que no nos casamos ni mañana ni pasado ni este mes ni el que viene. Manolo tiene que acoplar su agenda profesional con los distintos torneos que hay”. Aunque no quiere dar fecha la boda, será en Marbella y después de verano. Una ceremonia discreta y, de momento, sin exclusiva de por medio.

“Es la mujer de mi vida”

Manolo Santana, que cumplió 75 años el pasado 10 de mayo, se encuentra en un momento espléndido de su vida: “Me cuido mucho, procuro jugar todos los días al tenis o al pádel y evito el estrés, que no es bueno ni para la cabeza ni para el cuerpo. Soy feliz y procuro que la gente que está conmigo también lo sea. La felicidad  hay que buscarla y yo lo he intentado toda mi vida. Unas veces ha sido más fácil y otras más complicado. No me puedo quejar del balance de mi vida”. Respecto a Claudia asegura que le “trasmite mucho optimismo. Llevamos tiempo juntos y nos compenetramos muy bien. Quiero pasar el resto de mi vida con Claudia. Es la mujer de mi vida”.

Respecto a su próxima boda, explica que “los papeles son un tramite más. Cuando dos personas se unen es porque existe algo muy fuerte entre los dos y eso es lo que hay entre Claudia y yo. Es una mujer excepcional y al ser más joven que yo, tiene 55 años,  me da mucha marcha. Lo pasamos muy bien juntos. Compartimos aficiones y ella se encarga en el club de organizar toda la parte de comunicación y eventos. Es una mujer muy eficaz”.

Manolo Santana y Claudia se conocen desde hace casi veinte años. Formaban parte del mismo grupo de amigos de Marbella. En aquel momento, el tenista estaba casado con Otti Glanzielus y Claudia había enviudado. El matrimonio fue de gran ayuda económica y afectiva en aquellos momentos de soledad para la brasileña. Cuando Manolo Santana y Otti se divorciaron, sucedió lo contrario: Claudia se convirtió en el apoyo de su amigo. Cinco años después del inicio de aquella historia, la amistad inicial acabará en boda.