Rafael Amargo vuelve a divorciarse sin cumplir un año de casado

Una breve historia de amor: nI siquiera un año ha durado el matrimonio de Rafael Amargo con Silvia Calvet, su segunda esposa, con la que contrajo matrimonio en octubre del año pasado. Su primera aparición pública, en la boda de Alejandro Talavante, del brazo de la cantaora María Toledo en los últimos días, ha confirmado la separación. Fuentes del entorno del bailaor han asegurado a Vanitatis que “nunca se confirmó, papeles mediante, que Amargo se estuviese casando a pesar de la celebración”.

Añaden, además, que “la intención inicial era la de vender la exclusiva de la boda”. Sin embargo, ninguna publicación quiso comprarla. Ya era demasiado tarde para echarse atrás, ya que los festejos del enlace estaban perfectamente planificados y organizados. Así pues, Rafael Amargo contrajo matrimonio con Calvet en octubre de 2012. Silvia también era amiga de su ex, Yolanda Jiménez, con la que el bailaor siempre ha mantenido una gran amistad pero que, sin embargo, no acudió a esta boda. La novia iba vestida de Rosa Clará y parecía radiante ese día. 

Sin embargo, las mismas fuentes cercanas al bailaor han asegurado que “nunca hacían vida en común. Jamás los vimos juntos durante los pocos meses que ha durado el matrimonio”. Además, el divorcio confirmado por el propio Amargo, ha coincidido con la publicación de unas fotografías en las que aparece en una actitud cariñosa con un joven en la playa. De sobra es conocida la bisexualidad del bailaor, ratificada por él mismo y por su exesposa.

Una ex convertida en mejor amiga

A falta de saber cuál será la relación que Amargo mantenga con su nueva expareja, la que mantiene con su primera mujer, Yolanda Jiménez, siempre ha sido extraordinaria. De hecho, poco después de casarse con Calvet, se fue con ella a participar en el programa Expedición Imposible en lugar de irse de luna de miel con su nueva esposa. Yolanda y Rafael siempre han ido de la mano a numerosos actos y han mostrado una sintonía difícil de encontrar en una expareja.

Sin embargo, no siempre fueron tan buenas las relaciones entre los dos. La aparición de Yolanda semidesnuda, protagonizando una portada en la revista Interviú, no fue bien recibida por Amargo, que no acertaba a comprender, según sus amistades, por qué de repente su ex se había convertido en protagonista de la información, en un personaje más del mundo del 'cuore' que tanta atención le había prestado a él. Sin embargo, el tiempo los acabó convirtiendo en grandes amigos.

Está por ver cuál será la relación que el bailaor mantenga con su nueva ex, pero está claro que no hay vuelta atrás en su separación.