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Rosa Oriol, del mostrador de una tienda a la vicepresidencia del imperio 'Tous'
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la vicepresidenta de 'tous' charla con 'vanitatis'

Rosa Oriol, del mostrador de una tienda a la vicepresidencia del imperio 'Tous'

Joyas, complementos, y un oso de peluche. Érase una vez un señor llamado Salvador Tous que, en los años 20, inauguró una joyería que hoy es leyenda

Joyas, complementos, y un oso de peluche. Érase una vez un señor llamado Salvador Tous Blavíque, en los años 20, abre un pequeño taller de reparación de relojes que, poco a poco, y gracias a la gestión de su hijo Salvador Tous Ponsa y la esposa de éste, Rosa Oriol, se acerca al mundo de la joyería y que, con los años, adquiriría una dimensión planetaria gracias a un oso como símbolo principal. A nadie se le escapa que Rosa Oriol, vicepresidenta y directora creativa de la firma, es hoy una de las figuras más influyentes del mundo empresarial español. Además, ha hecho honores para llevar ese título y para transformar la firma heredada de la familia de su marido. Ella parece tener miedo de acomodarse y prefiere someterse a los riesgos del inseguro. “En casa siempre he oído decir: ‘El día que nos creamos que somos alguien, no vamos a ser nadie!’ Me gusta pensar que de esta manera hemos conseguido apostar por nuevos retos, arriesgar para tomar oportunidades”, asegura a Vanitatis.

Con el pelo corto y una imagen tierna a la vez que agresiva, Rosa y su hija, Rosa Tous, habla desde Manresa sobre el pasado, el presente y el futuro de su firma. Además, se muestra firme sobre su papel de mujer en un mundo de hombres y sobre una familia, la suya, que, peldaño a peldaño, ha constituido un imperio. “Estoy orgullosa de cómo hemos conseguido transmitirles nuestra pasión por la joyería a nuestras hijas y que hayan apostado por continuar en el negocio familiar”. Ese negocio familiar se ha expandido a más de 40 países, y ya quedan lejanos los tiempos en los que, como contaba el libro Los Tous: historia de una familia, una empresa y un osito hecho joya, Rosa se encontraba detrás de un mostrador en una tienda de Manresa, embarazada y como una simple dependienta. Hoy por hoy, marca tendencia.

placeholder Rosa Oriol (Tous)

Sin embargo, ¿se siente ella una de las mujeres más influyentes de España, tal y como dicen los demás? “Para nada, simplemente me considero una persona que ha tenido la suerte de dedicarse a una profesión que adora y que con los años se ha convertido en su pasión”. Sin embargo, es difícil transmitir esa pasión al resto de los mortales, que solo ven en las joyas algo utilitario. En casi todas las ciudades del mundo es habitual ver a mujeres con un bolso o alguna joya con el osito de rigor. La idea se le ocurrió cuando Rosa Oriol vio un osito en un escaparate. Desde entonces, la referencia a los recuerdos infantiles se mezcló con el lujo de las joyas. “Hemos desmitificado la joyería y ese ha sido nuestro gran acierto. La creación del oso, hace ya 27 años, supuso un hito importante, ya que fue el inicio de la marca como tal, con emblema propio e imagen consolidada”.

Rosa Tous (Tous)Sin embargo, el ‘osito’ fue un hito acompañado de otros, como el crear un “nuevo lenguaje en joyería”. Los más importantes, sin duda, han sido darle un empujón a la firma gracias a la imagen de Jennifer López, Eugenia Martínez de Irujo y Kylie Minogue. ¿Qué piensa de estas mujeres tan dispares entre sí la hija, Rosa Tous? “Realmente ha sido un placer trabajar con todas ellas. Jennifer es esposa y madre, compartimos los mismos valores familiares, así como las raíces latinas. Además es una persona que le encantan las joyas. Eugenia es dulce, muy amiga de sus amigos y destacaría su seguridad y carácter. Kylie es encantadora y sensible, y nos sorprendió lo tremendamente trabajadora que es! Aparte de ser guapísima y muy femenina, destacaría su talento y simpatía”.

Así, estas dos mujeres que abogan por los pendientes y han construido un imperio a su imagen y semejanza, parecen perfectas para soportar los vaivenes de la crisis, a la cual parecen desafiar perdiendo el miedo a innovar. Nuevamente, dejando atrás la confianza del seguro en sí mismo. “Las joyas son sentimientos y nos evocan recuerdos y momentos únicos de nuestra vida. Las joyas forman parte de nuestra historia…”.

Joyas, complementos, y un oso de peluche. Érase una vez un señor llamado Salvador Tous Blavíque, en los años 20, abre un pequeño taller de reparación de relojes que, poco a poco, y gracias a la gestión de su hijo Salvador Tous Ponsa y la esposa de éste, Rosa Oriol, se acerca al mundo de la joyería y que, con los años, adquiriría una dimensión planetaria gracias a un oso como símbolo principal. A nadie se le escapa que Rosa Oriol, vicepresidenta y directora creativa de la firma, es hoy una de las figuras más influyentes del mundo empresarial español. Además, ha hecho honores para llevar ese título y para transformar la firma heredada de la familia de su marido. Ella parece tener miedo de acomodarse y prefiere someterse a los riesgos del inseguro. “En casa siempre he oído decir: ‘El día que nos creamos que somos alguien, no vamos a ser nadie!’ Me gusta pensar que de esta manera hemos conseguido apostar por nuevos retos, arriesgar para tomar oportunidades”, asegura a Vanitatis.

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