Matías Prats y su pareja Ruth Izcue, ¿casi un año jugando al despiste?

La publicación de las fotos que confirman la reconciliación entre el conocido presentador Matías Prats y su compañera de trabajo Ruth Izcue ha provocado la reacción del exmarido de la periodista. Vanitatis se ha puesto en contacto con Fernando Sacristán, para quien este reportaje no parece casual, ya que las fotos podrían haber sido producto de una filtración interesada por parte de la pareja, dice, que de esta forma oficializaría un noviazgo que desde el principio estuvo rodeado de polémica.

Según Sacristán, la publicación de la ruptura en diciembre del 2013 no habría sido más que una “maniobra de despiste” para calmar los ánimos de la cadena en la que ambos trabajan juntos desde hace años. Ahora la pareja habría devuelto el favor a aquellos que informaron sobre un distanciamiento entre Prats e Izcue que nunca existió. "Pienso que esto no está hecho al azar. Este posado es un pago a las ayudas hechas en diciembre de 2013, es una manera de pagar lo que deben", comenta Sacristán, que asegura además tener mucha información al respecto porque es paparazzo de profesión.

Múltiples demandas

Sacristán e Izcue se separaron en marzo del 2013. Desde entonces, la pareja no ha sido capaz de llegar a un entendimiento y tienen varios procesos abiertos en diferentes juzgados de Madrid. "Ruth continúa viviendo en nuestra casa, ella tiene escriturado un 25% de esa vivienda, pero nunca ha pagado un solo euro, el crédito lo sigo pagando yo, por eso le reclamo 250.000 euros, que es la parte que le corresponde abonar a ella como copropietaria. Le interpuse una demanda en el juzgado número 4 de Alcobendas por reclamación de cantidad", asegura Sacristán.

A esta demanda se unen dos más que el paparazzo ha interpuesto contra la hermana y el padre de su exmujer por una deuda no saldada. Ruth, por su parte, denunció a Fernando por un presunto delito de revelación de secreto y otro de supuestos maltratos que está en trámite, a lo que Sacristán respondió con una querella por un delito de injurias y calumnias, dado que los hechos fueron contados por ella misma en un medio de comunicación. Esta situación ha llevado a ambos a tener que verse las caras prácticamente cada mes en los juzgados. Sin embargo, para Fernando la batalla más dolorosa es la referente a sus hijos.

"Hace año y medio que no veo a mis hijos. Hace un año firmé una autorización para que a mi hija la operasen de un brazo y hasta la fecha no sé nada más. No sé si la han operado o no. En ningún momento me los han dejado ver y, lo que es peor, los niños no quieren verme. Yo paso pensión por mis hijos, pero no sé nada de ellos. Los psicólogos me han recomendado que deje pasar tiempo. No quiero judicializar a mis hijos, prefiero esperar".