Javier Merino: "Sí, tengo malaria, pero confío en volver a Madrid lo antes posible"

La familia Merino Flores comienza a recuperarse del susto. Como adelantó Vanitatis, Javier Merino se encontraba en Ibiza pasando un fin de semana de descanso con su esposa Mar Flores y los hijos de ambos cuando comenzó a sentirse mal. Su mujer le llevó rápidamente a urgencias del hospital Can Misses, donde le diagnosticaron una malaria de tipo cuatro y, tras permanecer veinticuatro horas allí, fue trasladado a una de las habitaciones del centro sanitario. Este tipo de malaria, denominada plasmodium ovale, contiene un parásito menos peligroso que la de tipo uno. En este sentido, Javier, dentro de lo malo, ha tenido suerte.

Conseguimos localizarle telefónicamente este lunes por la tarde y nos respondió con voz débil y denotando un cierto cansancio: “Sí, tengo malaria, pero confío en evolucionar bien y volver a Madrid lo antes posible”.

¿Cómo te encuentras hoy?, le preguntamos. “Pues aquí estoy, en la habitación del hospital. Me están tratando. Ahora mismo tengo al médico a mi lado y me dice que no me fatigue. No puedo hablar mucho, lo siento”, se excusa. Sólo nos da tiempo a desearle una mejora prematura. “Eso espero, muchas gracias”, concluye antes de colgar.

El empresario ha vuelto hace apenas unos días de un viaje por Kenia y Sudán, donde se desplazó por motivos profesionales. Según fuentes médicas, allí podría haber contraído la enfermedad.

Una persona muy cercana a Javier y a su esposa desvela que “Mar se llevó un susto tremendo al ver cómo sudaba su marido. En un primer momento hubo quien llegó a pensar que podía padecer ébola; menos mal que los médicos descartaron de inmediato esa posibilidad. Pero el miedo que pasó Mar no se lo quita nadie. Ahora está mucho más tranquila, y más sabiendo que no es el peor tipo de malaria”.