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Blanca Cuesta sale de cuentas
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NUERA DE LA BARONESA THYSSEN

Blanca Cuesta sale de cuentas

La nuera de la duquesa está a punto de ser madre por cuarta vez, aunque en esta ocasión la novedad reside en el sexo del bebé. Será la primera hija para el matrimonio

Foto: Blanca Cuesta, en Ibiza este verano (Gtres)
Blanca Cuesta, en Ibiza este verano (Gtres)

Blanca Cuesta está a punto de ser madre por cuarta vez, aunque en esta ocasión la novedad reside en el sexo del bebé. Será la primera hija para el matrimonio y por eso la ilusión es doble, por lo que supone la llegada al mundo de un nuevo miembro dela familia y además por ser niña después de tres varones.

Blanca sale de cuentas esta semana y su hoja de ruta no variará con respecto al nacimiento de dos de sus otros tres hijos, que también lo hicieron en la clínica Ruber Internacional de Madrid. El mayor llegó al mundo en Barcelona, donde en aquellos años vivían los B&B. Todos los alumbramientos fueron por parto natural y los bebés pesaron algo más de tres kilos. Pequeñas variaciones en gramos y centímetros. Y también fue común a los tres embarazos la recuperación espectacular de Blanca.

En la presentación del libro de memorias del barón Thyssen, celebrada en Madrid hace unas semanas, una embarazadísima Blanca Cuesta comentaba esta circunstancia: "Mi ginecólogo me dice que mis partos son comodísimos. Y es verdad, con la epidural,ni me entero". Las otras diferencias con respecto a los nacimientos de Sacha, Eric y Enzo tienen que ver sobre todo con la parte emocional de la familia. Desde que se rompió el hielo entre Tita y su hijo Borja, las relaciones filiales mejoraron y, por lo tanto, lo normal será que la abuela acuda al centro hospitalario cuando nazca la primera nieta, que parece que se llamara Valentina.

Ya no habrá trifulcas como con el nacimiento de Enzo, cuando la baronesa decidió montar un operativo mediáticoacudiendo a la clínica, ante la incredulidad de Borja y Blanca, que no entendían la reacción de la madre y suegra. Sobre todo, porque se estaban enterando en directo a través del espacio que en aquel momento presentaba Anne Igartiburu en las tardes de TVE.

Los periodistas comentaban en tiempo real el despliegue de Carmen Cervera por un lado y lo que sucedía en la habitación de la Ruber por otro. El caso es que esa visita se convirtió en otro conflicto más que añadir a las tensas relaciones entre Borja y su madre. La baronesa decía que no le habían dejado ver a Enzo y le echó la culpa a Blanca, a la parturienta.

Esta vez no habrá sainete. Con buena cabeza, Tita y su hijo decidieron que ya estaba bien y que los desencuentros no solo costaban un dineral, por los procesos legales abiertos por ambos lados,sino que había que preservar el patrimonio. La única manera de solucionar el entuerto se resumía en empezar de nuevo y así se hizo. Se retiraron las demandas y Tita se comprometió a cumplir el pacto con Borja, que le había dicho: "Si no quieres a Blanca, al menos respétala". Y cumplió el trato.

Una vez que Blanca tenga a la niña en casa, volverá a pintar. Durante el embarazo lo tuvo que dejar porque el olor a pintura le producía un gran malestar. Empezó por hobby, con copias de personajes del mundo Disney que regalaba a los amigos. Después, esas amistades le hacían encargos para decorar los dormitorios infantiles de sus hijos. No quedó ahí la cosa. Se percató de que le gustaba esa actividad y decidió profesionalizarse. Hasta ahora ha participado en varias exposiciones colectivas y el verano pasado protagonizó una en solitario,donde vendió la mayoría de la obra. Una vez cubiertos los gastos de la sala, el resto lo donó al padre Ángel.

Blanca Cuesta está a punto de ser madre por cuarta vez, aunque en esta ocasión la novedad reside en el sexo del bebé. Será la primera hija para el matrimonio y por eso la ilusión es doble, por lo que supone la llegada al mundo de un nuevo miembro dela familia y además por ser niña después de tres varones.

Pintura
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