El juicio de divorcio de Patricia Conde y Carlos Seguí se celebrará el 3 de marzo

La guerra sin cuartel entre Patricia Conde y su ex, Carlos Seguí, sigue su curso. Según ha podido confirmarVanitatis de fuentes judiciales, la expareja se volverá a ver las caras el próximo 3 de marzo a las 10 de la mañana, momento en el que se celebrará el esperado juicio de divorcio entre la pareja, enel que se decidiráncuestiones como el reparto de bienes o la pensión compensatoria. Uno de los asuntos que no se dirimirán será la custodia compartida ansiada por Seguí. La razón es simple: Patricia Conde recurrió la sentencia donde se archivaba la acusación de maltrato psicológico contra su exmarido.

Desde que hace justo un año anunciasen su separación de “mutuo acuerdo”, las batallas en los tribunales han sido habituales y complicadas, ya que la presentadora se ha llegado a sentar en el banquillo de los acusados del Juzgado de Instrucción número 1 de Alcobendas por presunto delito de revelación de secretos, al presentar como prueba contra su exmarido un total de 70 correos intercambiados entre Seguí, sus letrados y su asesor fiscal, así como copia de cuentas bancarias cuya finalidad por parte de la presentadora sería la de averiguar los ingresos económicos de su exmarido de cara a solicitar una manutención.

Ahora, los abogados de Patricia Conde también se sentarán en el banquillo, ya que también han sido citados en el Juzgado el próximo 28 de abril en calidad de imputados.

Según fuentes próximas a la expareja, el hecho de recurrir la sentencia que eximía a Carlos Seguí de la acusación de maltrato psicológico podría ser una maniobra de los abogados de la presentadora de Killer Karaoke para aplazar la decisión del juez sobre la custodia compartida del hijo de ambos.

Lo cierto es que, desde que Conde fuese imputada por presunto delito de revelación de secretos ha mostrado una actitud nerviosa. Primeroeludió la cita en los juzgados el pasado 25 de noviembre alegando motivos profesionales, a pesar de que se encontraba de vacaciones. En segundo lugar, el pasado enero acudió a la cita con una peluca y una bufanda que le tapaba casi la totalidad de su cara para eludir a los periodistas que, sin embargo, se percataron de que se trataba de ella. Inmediatamente después, salió a la carrera para que no le hiciesen preguntas sobre su declaración.

El próximo 3 de marzo, tanto ella como Carlos Seguí volverán a encontrarse en los juzgados viviendo otro episodio más de una lucha sin cuartel que parece no tener fin.