Arrumacos, confidencias y mucho fervor entre los famosos en Semana Santa

Un año más, las procesiones de Semana Santa congregan a grandes rostros conocidos que acuden para rendir homenaje a las vírgenes y santos de cada ciudad. En el caso de María Teresa Campos, el admirar los pasos procesionales desde un balcón de Málaga se ha convertido en una tradición familiar en la que compartir tiempo con sus hijas, su nieta y, este año, también con su pareja, Edmundo ‘Bigote’ Arrocet. La pareja aprovechó la ocasión para demostrar una vez más que en su relación aun prende con fuerza la llama de la pasión entre caricias, besos y arrumacos varios a la vista de los devotos presentes.

Málaga también es un destino habitual de Antonio Banderas durante Semana Santa. Un año más, el actor ha ejercido de mayordomo en el trono de la Virgen de las Lágrimas y Favores en compañía de su hermano Francisco Javier y el alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre. Aunque ya el año pasado acudió sin Melanie Griffith, lo que dio lugar a rumores de crisis en su matrimonio, este 2015 es la primera Semana Santa que pasa como un hombre divorciado.

En Sevilla, por su parte, también sus pasos procesionales cobran mayor relevancia en los medios gracias a la presencia de ilustres personajes del papel cuché. Este es el caso de Francisco Rivera, que un año más ha vuelto a mostrar su devoción por la cofradía de la Esperanza de Triana, en la que también milita José María Moriche, marido de la presidenta en funciones de la Junta de Andalucía, Susana Díaz.

Allí, en Sevilla, también cumplió con la tradición Kiko Rivera, que ha celebrado su Semana Santa más complicada, tras su enfrentamiento con su hermano Francisco, el encarcelamiento de su madre por blanqueo de capitales y su tormentoso paso por la casa de Gran Hermano VIP. Unas circunstancias a las que el DJhace frente con la ayuda de su chica, Irene Rosales, la cual le ha acompañado este Domingo de Ramos en la capital hispalense. A pesar de estar a escasos metros de su hermano Fran y su cuñada Lourdes, Kiko Rivera disfrutó de este día alejado de los suyos pero sin perder la sonrisa.

Aunque son muchos los famosos que ocupan numerosos balcones en la Semana Santa andaluza para admirar los distintos pasos procesionales, hay otros que han preferido pasar desapercibidos mezclándose con la gente. Este es el caso de Rocío Herrera, hija de Mariló Montero y Carlos Herrera, que también se encontraba entre los vips que arropan a las vírgenes y santos que han desfilado por la capital hispalense.