La metamorfosis de Belén Rueda incendia las redes sociales

El estreno de 'La embajada' este miércoles fue una sorpresa para todos, adictos o no a la televisión. La nueva serie de Antena 3 cosechó un 22.5% de 'share' y devolvió un protagonismo inesperado a Belén Rueda, que desde hace años no 'golpeaba' tan fuerte en la pequeña pantalla. Pese al éxito, hubo quien también puso peros a su interpretación y a su cara. “Nicole Kidman 2? Una cara sin arrugas, de plástico, es más bella?”, decía un usuario de Twitter hace días, cuando la actriz y presentadora acudía al programa 'El hormiguero' para hablar de la serie y presentar la película 'La noche en que mi madre mató a mi padre', con la que también participa en el Festival de Cine Español de Málaga. Pese a las sospechas de varios 'followers', no parece que su cara haya pasado por el quirófano.

“Es una persona relativamente joven, con cincuenta y pocos, y no es probable que se haya hecho un 'lifting'. En primer lugar porque no es necesario. En segundo porque, de habérselo hecho, habría pistas que lo indicarían y en su caso no aparecen”, asegura José Luis Vicente-Péix, director de la clínica estética Esbeltic Model. Sin embargo, puede que Belén sí haya recurrido a ciertos procesos o tratamientos que aligeran el proceso de envejecimiento y son bastante comunes en mujeres de su edad. “Comparando fotos antiguas con sus últimas imágenes, sí se aprecia un aumento de volumen en los pómulos, que con toda seguridad se corresponde con el uso de ácido hialurónico. También podría haberse hecho un aumento de labios con el mismo ácido”.

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Otros aspectos del rostro de la actriz parecen incólumes al paso del tiempo. Sin embargo, puede que haya truco tras su aparente perfección. “No se aprecia flacidez en la zona de la papada, ni descolgamiento de platisma. Para ello puede haber utilizado diferentes métodos, pero me inclino por los hilos tensores, que dan muy buen resultado en esa difícil área del rostro”, asegura Vicente-Péix, que también habla de la magnífica piel que conserva la actriz. “Una piel fresca y luminosa como la suya puede deberse a las inyecciones o plasma rico en plaquetas”. Lo que está claro es que, en contra de la opinión de muchos tuiteros, la actriz no parece haber tenido que recurrir a la cirugía para alterar su cara. De hecho, ella misma dijo en una entrevista realizada hace un año que la cirugía le daba “miedo”. Un repaso a su cara lo reafirma. “Tiene una imagen envidiable a sus 51 años”, añade el experto en medicina estética. Y es que, cumplido el medio siglo, puede que Belén Rueda esté, físicamente, en su mejor momento.

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