Un desahucio, un crowdfunding y el forense del caso Bretón: el interminable entierro de La Veneno

El cuerpo de Cristina Ortiz La Veneno sigue en una cámara frigorífica en el Tanatorio Norte de Madrid a la espera de realizársele una tercera autopsia. Tal y como la familia ha confirmado a Vanitatis, el resultado de accidente doméstico de las dos autopsias anteriores no les convencen. “Mi hermana ha muerto por una paliza. Ella no tenía problemas con el alcohol. Queremos que un nuevo forense examine los restos de piel humana que encontraron debajo de las uñas de mi hermana para conocer a quién pertenece el ADN de esa piel”, afirma Trini, hermana de La Veneno.

A pesar de que los recursos económicos con los que cuenta la familia de la vedette son escasos, quieren contratar a uno de los mejores forenses de España. “Queremos que el forense que llevó el caso de los hijos de José Bretón se encargue de una nueva autopsia. Sabemos que va a ser cuantioso, pero queremos saber la verdad. Mi madre es muy mayor y lleva muchos días sin querer salir de la cama porque quiere que nuestra hermana descanse en paz”, asegura Trini a Vanitatis.

El problema que tienen es el económico. Por eso hacen un llamamiento público para recibir aportaciones dinerarias. “Pedimos que por favor cualquier persona que nos quiera ayudar económicamente se ponga en contacto con nosotros porque deseamos darle a mi hermana una despedida digna. Llevamos más de 20.000 euros gastados y mantener el cuerpo en el tanatorio nos cuesta 360 euros diarios. Ninguno de los que dicen ser sus amigos se han puesto en contacto con nosotros para ayudarnos, a pesar de lo que han dicho en los medios de comunicación”, indica la hermana de la artista.

Según explica Trini, lo que la familia quiere realmente es, “una vez que se sepa la verdad”, incinerar su cuerpo y repartir las cenizas entre Madrid y Adra.

Emprenden una batalla legal contra el novio de La Veneno

Al dolor de no poder enterrar aún a su hermana, se une la batalla que han comenzado contra Alin, el novio de La Veneno. “Hemos presentado ya la orden de desahucio porque no es justo que este chico siga viviendo en la casa que está a nombre de mi padre”, asegura.

Además, adelanta que van a denunciarle también “por haber estado vendiendo los objetos personales de mi hermana, porque no hay derecho”. Según cuenta a este medio, “a mi madre le dolió muchísimo ver que hasta había vendido el cepillo de dientes por cuatro euros. Queremos las cosas de mi hermana, pero no vamos a permitir que siga haciendo un negocio con ellas”, destaca.

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