Alonso Aznar pierde dinero en el negocio del amor

Mientras la carrera profesional de Alonso Aznar sigue afianzándose como Head of Spain and Portugal en la multinacional Afiniti, sus incursiones en el negocio del amor no parecen reportarle demasiados beneficios. El hijo menor de los Aznar comenzó en esto del ligoteo virtual con la app Wibbi allá por 2014 junto a su socio y hombre de confianza en otros negocios (como el restaurante Pipa and Co) Fernando Nicolás. Después llegaría otra aplicación llamada Muapp. Sin embargo, Cupido no logra acertar con su flecha del amor en Night Phone Guide SL, la empresa desde la que se gestionan estas dos apuestas. Las últimas cuentas presentadas (en octubre de 2016 y correspondientes al ejercicio de 2015) reportan un saldo de pérdidas de 91.681 euros, unos mil euros menos que el año anterior, cuando el saldo negativo ascendía a 92.382 euros.

Night Phone Guide S.L., de la que Fernando Nicolás es el administrador único y Alonso es socio, aunque no sabemos con qué participación, fue constituida en 2012 según consta en el registro mercantil. El pasado mes de abril, Marta Nicolás, hermana de Fernando, se convertía en apoderada de la entidad, aunque ha participado activamente en el negocio desde el principio. La empresa arrastra además una deuda a largo plazo con una entidad de crédito de 57.088 euros y a corto plazo de 32.504.

Fernando y Alonso son amigos y socios desde hace muchos años. A Fernando dicen que le pesa el cliché de haber sido compañero de pupitre de Ana Aznar y ahora socio de su hermano, porque no le gustan los encasillamientos. Algunos lo definen como el 'rey de la restauración' porque ha levantado un imperio de exitosos restaurantes chics llamado grupo Larrumba, al que son asiduos los cachorros de la jet. El primero fue Pipa and Co, en el que sus socios eran María Fitz-James Stuart y Chiqui Calleja, entre otros. Alonso participó en sus inicios con dinero e ideas, aunque luego se cayó de la página registral porque no "le convenía para sus negocios".

¿Te tomas una copa?

Los jóvenes empresarios primero acordaron lanzar Wibbi. La app nacía para hacer competencia a otras formas de ligar virtuales con un elemento diferenciador: permitía conectar a usuarios que estuvieran en la misma discoteca, cine, teatro, gimnasios, aeropuertos u otros sitios de escarceo. "¿Te apetece una copa?", "¿Qué plan tienes?" o "Te invito a lo que quieras" son algunos de los enlaces que podían lanzar a esa persona a la que 'echas el ojo'. El propio Alonso dijo durante su presentación que se dejó embaucar por "la idea y el producto que se estaba desarrollando. La forma de relacionarse está cambiando y esta aplicación responde a las necesidades que tienen las personas hoy en día. Ahora todo el mundo tiene dependencia del Facebook y del Whatsapp y nadie puede vivir sin plataformas de este tipo".

First Ladys

Después llegó otra idea más avanzada. Una app para que sean las mujeres las que decidan. "Mujeres primero" es el eslogan con el que sintetizaron la idea de una nueva aplicación para ligar en la que las mujeres decidieran con quién y cuándo. Y ahí capitaneó el diseño Marta. Tres años después del inicio de este proyecto, la cosa no parece haber dado aún sus frutos, aunque habrá que esperar las cuentas del 2016 para saber si Muapp ha levantado el imperio amoroso de estos colegas o si, por el contrario, ha llegado para rematarlo.

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