Eva Longoria reniega del polémico chiringuito de Marbella Playa Padre

Eva Longoria se desvincula de Playa Padre, el chiringuito de Marbella que está en plena construcción. La actriz ha instado a su amiga María Bravo para que deje muy claro que “Eva Longoria no tiene nada que ver con ese club”. Según ha sabido Vanitatis, la 'mujer desesperada' desconocía casi todo de este proyecto: situación, ubicación, concepto, filosofía... Los mismos operarios que lo construyen ya tenían órdenes de contestar con un 'sí' a la pregunta: "¿Este es el chiringuito de Eva Longoria?". Así lo pudo comprobar (y grabar) este medio cuando realizó el reportaje hace unas semanas.

[Estos eran los problemas a los que se enfrentaba la actriz]

Tras distintas publicaciones en la prensa, la actriz ha pedido encarecidamente a su amiga María Bravo que la desvincule del club que ella y su novio, Nicolás Escanez Galeras, están realizando con otros socios en la playa del Cable de Marbella. Un conocido empresario con clubes de élite en la zona significa a Vanitatis: “Ya sabíamos que era un bluf. Que Eva Longoria no tenía nada que ver con todo esto. Que solo habían utilizado como reclamo el nombre de la actriz, a la que tenemos por una persona inteligente y dudábamos que fuera a abrir ningún negocio en una playa ubicada a pocos metros de la barriada gitana de las Albarizas, de la que acaba de salir un informe esta semana que asegura que es la zona de más delincuencia en Marbella. Allí no hay ni un aparcamiento para dejar los vehículos”.

Según las declaraciones de María Bravo, recogidas por la revista 'Semana' en su publicación del 30 de marzo, Eva Longoria visitará el chiringuito Playa Padre como amiga y por la amistad que la une con ella, pero no formará parte del negocio. "Eva Longoria es mi amiga y por supuesto que vendrá a conocerlo, como todos los demás, pero no forma parte de este negocio". De esta manera y a petición de la propia actriz, su amiga María ha tenido que aclarar que Eva Longoria no va a invertir “ni un euro” en Marbella. Hace unos días, la Delegación de Sostenibilidad del Ayuntamiento, en las labores de inspección que realiza periódicamente en esta zona, instó a los responsables del chiringuito Playa Padre a la retirada de las palmeras que se habían instalado en las inmediaciones del club.

“Estaban plantando palmeras para delimitar su terreno. La playa es una zona pública donde todo el mundo puede bañarse y ellos ya estaban acotando el terreno para su exclusividad”, explica a Vanitatis un bañista asiduo a esta histórica playa de Marbella. El mismo concejal del ayuntamiento marbellí Miguel Díaz puntualiza que “se les ha conminado a retirar las palmeras. Se va a llevar a cabo una nueva inspección porque tenemos que velar por que se cumpla el Plan de Playas y no salirnos de esos parámetros”. Sostenibilidad ya ha puesto en conocimiento de la Junta de Andalucía el requerimiento realizado para la retirada de las palmeras, ya que depende del organismo autonómico la competencia para dar la resolución.

Sobre la legalidad del cercado que se está haciendo en el entorno del chiringuito y de si cuenta con las licencias legales como establecimiento playero, el mismo alcalde de la ciudad, José Bernal, ha apuntado que “nuestro Gobierno es meticuloso con la ley, la normativa y cualquier otro reglamento que se lleve a efecto”. Y explica que exigirá que se cumpla la ley “por el bien e interés general de todos los ciudadanos”.

Un lugar poco idóneo para el glamour

Vanitatis publicaba hace unos días las declaraciones de un empresario de Marbella que decían textualmente que “seguramente Eva Longoria no tiene ni idea de dónde han comprado la concesión para este beach club. Esa es la playa donde va la gente del pueblo que tiene arriba sus viviendas. La mayoría son de etnia gitana. Cuando bajan a la playa montan allí sus tenderetes, sus carpas de playa y sus neveras y acampan para pasar el día. Es decir, nada que ver el lugar para un club destinado a bolsillos pudientes con camas balinesas, música en directo, cocina de mercado y show de botellas de champán francés con bengalas con la música de los Chichos a toda pastilla al lado”. A las espaldas del club de playa que anunciaron de Longoria está el depósito de coches para desguazar del polígono industrial de Marbella: “Cualquiera que se baje de los barcos que dicen que van a llegar ahí (otra cosa que es imposible es que atraquen en ese lugar) tendrán como paisaje los talleres del desguace de los coches”.

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Para colmo de inconvenientes, en un lateral, a menos de doscientos metros de Playa Padre, se encuentran las barbacoas municipales. “Esa es otra -continúa este empresario-. Justo al lado del chiringuito de la actriz están las barcas de arena destinadas para que el pueblo de Marbella haga sus barbacoas. Son las que el Ayuntamiento cede a los vecinos para que asen ahí sus espetos. Cada vecino pide permiso al Ayuntamiento y le dan la barca para que haga un fuego”.

En principio el chiringuito abrirá sus puertas a finales de mayo y el novio de María Bravo, Nicolás Escanez, es la persona que supervisa a diario la obra para que todo esté al detalle en el beach club. Junto al exdirectivo de Olivia Valere, Albert Beniflah. El precio de adquisición del chiringuito, según ha sabido Vanitatis, se cerró en 750.000 euros.

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