El político Pablo Casado, 'celebrity' por sorpresa en la embajada italiana
La gran ausente fue Paula Echevarría, que está a punto de anunciar su divorcio. En el 'impasse' destacó sobre los demás el político del Partido Popular por su cercanía
Desde que llegó a Madrid Stefano Sannino -representante diplomático del Gobierno italiano en España- ha convertido su residencia en el epicentro cultural y social del barrio de Salamanca en Madrid. El palacete de la calle Juan Bravo, que fue propiedad de los marqueses de Amboage, fue el escenario de la entrega de premios ELLE Gourmet, que organiza desde hace tres años Benedetta Poletti, directora de la revista.
A diferencia del año pasado, que descargó el diluvio universal, esta vez no hubo sorpresas e invitados y premiados disfrutaron de una tarde-noche espectacular. Un acto presentado por Patricia Conde y Ramón Arangüena, que son fijos en esta convocatoria.
La rubia presentadora ha puesto la voz a la protagonista de 'Gru 3', prepara programa para una cadena y mantiene su cruzada contra los que amenazan e insultan amparándose en el anonimato de las redes sociales. "Uno de ellos me envió a mi Instagram el mensaje de 'Voy a secuestrar a tu hijo'. Ahora con la muerte del torero Fandiño se vuelve a repetir esa impunidad que no se puede permitir. Mi tema lo llevan los abogados y llegaremos hasta el final”, cuenta la vallisoletana.
La extraña ausencia de Paula Echevarría
Entre los premiados de esta tercera edición se encontraban Sara Carbonero, recién llegada de Navalacruz, que se marcó un baile con Eva González; el cocinero Ramón Freixa, las dos Mercedes (Valdenebro y Peralta), el bodeguero Javier Moro, Gala Trussardi, el chef Carlo Cracco y Carme Ruscadella. Todos ellos encantados con el jurado que los seleccionó.
Llamó la atención que no acudiera Paula Echevarría, que mantiene una relación directa con la revista a través de su blog, donde cuenta todas sus peripecias diarias. Ella y David Bustamante fueron el fin de semana los protagonistas de las redes y del mundo del colorín en la primera comunión de su hija. Que si se besan, que si no, que si David le pone la mano en el trasero, que si las familias no se tratan, que si Paula se marchó con la suya a su pueblo de Candás y David se quedó con la suya… A la espera del comunicado conjunto -que va a ser inminente- y donde anunciarán su separación, Paula prefirió no dejarse ver en esta fiesta de la Embajada italiana.
Pablo Casado, la cara amable del PP
En su lugar, el protagonista de la noche fue Pablo Casado, vicesecretario de comunicación del PP, que acudió acompañado de su mujer, Isabel Torres, y explicó que “procuro acudir a los lugares donde me invitan aunque no tengan que ver con temas políticos como son estos premios". Casado, que es la cara amable y sin pasado del PP, charló con todos los que se le acercaban.
Desde Álvaro Fuster que sigue manteniendo la amistad con el rey Felipe (a pesar de la Reina), a Julio Ayesa, Emilio Gutiérrez Caba, pasando por los periodistas presentes. Habló del momento político, de la moción de censura y el papelón de Pablo Iglesias, de la conciliación familiar y de cómo a su hija le parece normal verlo por la tele. Esa noche el político relevó en protagonismo a la actriz de 'Velvet'.
Resulta inusual que en una convocatoria social los políticos despunten. Normalmente acuden de tapadillo o en el caso de que les den un premio, lo recogen, dan las gracias y se marchan. Poca comunicación con el resto de invitados por temor a determinadas críticas, cuando en realidad la cercanía les hace ganar puntos. Felipe González era un maestro y no se perdía convocatoria cuando era ejerciente y José María Aznar hacía lo propio. Por cierto, el popular fue el invitado especial en la cena de gala de la Lucha Contra el Cáncer en Marbella. Este año repite y se espera que la convocatoria sea un éxito como el año pasado.
¿Tienes un dispositivo móvil iOS o Android? Descarga la APP de Vanitatis en tu teléfono o tablet y no te pierdas nuestros consejos sobre moda, belleza y estilo de vida. Para iOS, pincha aquí, y para Android, aquí.
Desde que llegó a Madrid Stefano Sannino -representante diplomático del Gobierno italiano en España- ha convertido su residencia en el epicentro cultural y social del barrio de Salamanca en Madrid. El palacete de la calle Juan Bravo, que fue propiedad de los marqueses de Amboage, fue el escenario de la entrega de premios ELLE Gourmet, que organiza desde hace tres años Benedetta Poletti, directora de la revista.