Kira Miró: "Nunca me he sentido una mujer florero"

Kira Miró puede sentirse afortunada. Y es que, desde que aterrizara en televisión allá por el año 1999, la actriz canaria no ha parado de enlazar un trabajo tras otro. Ahora, tras haber participado con éxito en la obra de teatro La fuga junto a Amparo Larrañaga y José Luis Gil, Miró vuelve a la televisión de la mano de Nacho García Velilla (Aída, Siete Vidas, Gominolas) para participar en Fenómenos, como ya adelantó Vanitatis en exclusiva.

Allí interpretará a Victoria Reyes, una mujer florero que siempre ha sido segunda en todo: la segunda dama de honor en Miss España 1991, la segunda como amante de un hombre casado... Ahora puede demostrar que es capaz de ser la primera en algo y dirigir una emisora de radio. Pero esta vez para salir adelante no le bastará con desfilar en bañador y sonreír.

-El papel que interpretas es de mujer florero. ¿Te has sentido alguna vez así?

No, la verdad es que no. No he sido mujer florero ni lo voy a ser. Siempre he trabajado, me he mantenido yo solita, sé defenderme y no he necesitado a nadie.

¿Tampoco te presentaste a algún certamen de belleza?

No, me daba mucho corte. No tengo cuerpo ni altura.

Victoria intenta demostrar que es algo más que un físico. ¿A tí te ha costado alguna vez, por tu físico, tener que demostrar más que otras personas?

Hace tiempo que dejé de luchar contra eso. Ya me di cuenta que el tiempo pone a cada uno en su sitio. No tengo por qué luchar por demostrarle a nadie nada. Mi misión es ir al rodaje, hacer el trabajo lo mejor que puedo y demostrarmelo a mi. La gente juzga, está en su derecho, pero cuando rascan un poquito, igual se llevan una sorpresa.

¿Qué tienes en común con ella?

El físico (risas). Y las inseguridades, la dulzura, que tenemos carácter pero no lo sacamos fácilmente.

¿Y en qué eres un fenómeno?

En el deporte. Desde pequeña hago muchos deportes y tengo un montón de medallas y copas. He hecho salto de trampolín, atletismo, baloncesto, natación, equitación, golf, snowboard... 

¿Cómo llegó a tus manos el proyecto?

Me llamó Nacho que ya lo conocía de haber trabajado con él en varias producciones. Hice la prueba, les gusté mucho y a mí me encantó porque el guión es muy divertido. No es un personaje sólo de una pija sino que tiene muchos conflictos, situaciones que producen mucha comicidad. Es una mujer que evoluciona.

¿En quién te has inspirado?

Así como en No le llames amor, llámalo X me empapé de porno, aquí me he visto gazapos de misses en YouTube. ¡Menudos berenjenales en los que se meten! Yo las entiendo en cierto modo porque deben estar muy nerviosas. Me inspiré en Miss Melilla y en alguna que otra.

¿Qué más proyectos tienes?

Estoy ensayando con José María Flotats la obra La verdad, que estrenaremos el próximo 5 de octubre en el Teatro Alcázar.

En los últimos años triunfan series de época. ¿Te ves en un papel de este tipo?

Me encantaría hacer un personaje de época. Solo he hecho uno y creo que daría muy bien de época. Lo que pasa es que me ven moderna.

Encadenas trabajo tras trabajo. ¿Te sientes afortunada?

No he parado de trabajar. No me puedo quejar. Soy una afortunada.

¿Eres autocrítica?

Sí. De hecho he tenido una grata sorpresa con Fenómenos porque ha sido la primera vez que no he sido tan mala conmigo mismo y no he sacado el látigo para fustigarme.

¿Y las críticas de los demás en redes sociales? ¿Te dan miedo?

Leeré los comentarios, intentaré tomarmelos con humor, y le daré importancia a los que lo tienen. Hay gente para todo.