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Telecinco llena los juzgados de Alcobendas y una magistrada tira la toalla
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Telecinco llena los juzgados de Alcobendas y una magistrada tira la toalla

 Localidad madrileña de 100.000 habitantes, Alcobendas se ha convertido en un ir y venir de rostros de Telecinco. Los colaboradores de sus programas inician sus peleas

 Localidad madrileña de 100.000 habitantes, Alcobendas se ha convertido en un ir y venir de rostros de Telecinco. Los colaboradores de sus programas inician sus peleas en los platós y las terminan en los juzgados. El resultado: un tribunal lleno de famosos y una magistrada que deja su cargo por no poder hacer frente a este tipo de casos.

Según publica el diario El Correo¸ una magistrada que no quiere dar su nombre, ha dejado su puesto de trabajo hace unas semanas por no poder aguantar más la cantidad de casos televisivos que encerraban sus salas. Las productoras que más trabajan con Telecinco  y la propia cadena tienen como residencia judicial Alcobendas y todos los programas acaban allí para resolver sus conflictos. Sálvame, Enemigos íntimos, Aquí hay tomate o La Noria han sido algunos de sus mejores benefactores.

La gran mayoría de estos conflictos se resuelven de una forma muy rápida: vía penal y un coste de 1.300 euros. El tribunal de primera instancia de Alcobendas cubre desde hurtos y robos hasta quién mintió sobre la separación de Fernando Alonso.

Según la magistrada que ha abandonado el tribunal, este tipo de querellas absorbe el tiempo de los trabajadores que allí se encuentran y no pueden atender otro tipo de casos. “Convierte a los jueces en rehenes de los higadillos de la telebasura”, denuncian los magistrados de Alcobendas.

La única solución, según los protagonistas de esta historia, es fomentar la medición para que este tipo de temas no lleguen a los tribunales. El propio diario advierte que de entre estas paredes han salido cuantiosas indemnizaciones. Telecinco tuvo que pagar 180.000 euros a José María Aznar y Ana Botella por hablar de una separación. La misma cadena pagó 336.000 euros a Enrique Iglesias por publicar fotos manipuladas de un desnudo y 270.000 euros a Pepe Navarro por hacer alusión a una falsa paternidad.

Alcobendas se ha convertido en una segunda casa para los colaboradores de la cadena de Fuencarral. Algunos hacen programas diarios por la mañana y hacen intervenciones esporádicas por las noches. Por las tardes, Sálvame  es la que más responde ante la justicia. Todos sus colaboradores, incluido su presentador, se han paseado por los tribunales. Belén Esteban tuvo que pagar 120.000 a Carmen Lomana; Raquel Bollo fue a juicio por argumentar que había perdido a su hijo por las palizas de su ex, Chiquetete; Rosa Benito llevó ante la justicia a Alessandro Lecquio por acusar a su marido de cornudo. Son sólo algunos ejemplos de lo que llena los archivos de Alcobendas.

 Localidad madrileña de 100.000 habitantes, Alcobendas se ha convertido en un ir y venir de rostros de Telecinco. Los colaboradores de sus programas inician sus peleas en los platós y las terminan en los juzgados. El resultado: un tribunal lleno de famosos y una magistrada que deja su cargo por no poder hacer frente a este tipo de casos.