Es noticia
¿Por qué las televisiones no apuestan por programas de 'late night'?
  1. Televisión
TELEVISIÓN

¿Por qué las televisiones no apuestan por programas de 'late night'?

Era la forma que tenía una cadena de televisión de despedirse de los espectadores hasta la mañana siguiente. El late show era un programa dinámico, entretenido

Era la forma que tenía una cadena de televisión de despedirse de los espectadores hasta la mañana siguiente. El late show era un programa dinámico, entretenido y que rompía el corsé que las cadenas tenían que ponerse en prime time por ser horario protegido. Pepe Navarro fue pionero en España, pero otros muchos cosecharon auténticos récords de audiencia hasta que los espectadores rechazaron este formato. Se aceptó, sin embargo, alargar el chicle del horario estelar hasta altas horas de la madrugada para subir la cuota media del programa.

El mismo chicle que antes terminaba a las 12 de la noche para dar paso a un nuevo programa ahora aguanta hasta las 2:30 de la madrugada. ¿Qué consiguen así? Un programa como Gran Hermano, si terminase a las 00:00 horas tendría datos muy pobres cuando su fuerte es el late night. Este último lunes, la gala consiguió un 16,5% de media durante todo el programa. Sin embargo, de 00:00 a 2:30 horas, la cuota sube hasta un 19,9%. Hubo un momento en el que quedó al demostrado que es mucho más fácil y mucho más barato continuar viendo un programa de prime time que se alarga hasta la madrugada que un late night que rompe con la noche del espectador.

Pepe Navarro fue el primer trasnochador en España. El mítico Esta noche cruzamos el Mississippi creó escuela en la televisión desde 1995 y detrás de él vinieron sus aprendices. Aunque aparecieron muchos como Jordi González en TV3 (Les Mil y Una), tuvo que llegar Javier Sardá en 1997 para coger su puesto tras la polémica huida de Navarro a Antena 3, donde sólo se mantuvo unos meses en antena. Sardá ha sido el late de más éxito en España, en antena durante 8 temporadas, hasta 2005, con cuotas que alcanzaron el 40%.

Por el camino surgieron nombres como el de Máximo Pradera (Maldita la hora) en Antena 3, sin éxito. Fue Andreu Buenafuente el único que logró mirar cara a cara a Sardá. Directo desde TV3, el catalán aterrizó en Antena 3 con Buenafuente.  Estuvo en antena durante tres temporadas, para luego dar el salto a laSexta durante otros tres años. Sus mejores datos los hizo en su primera temporada, con un 24,8% de media, coincidiendo con el cierre de Crónicas Marcianas después de 1277 programas.

Santi Millán: "Un programa contenedor tiene mejor audiencia"

Después llegaron varios novatos como Eva Hache (Noche Hache) y Manel Fuentes (La noche…con Fuentes y Cía), dos grandes éxitos para Cuatro y Telecinco, respectivamente. Sin embargo, poco a poco se iba agotando la fórmula. El último en intentarlo fue Santi Millán en Cuatro con UAU! El programa duró 51 entregas, anotando máximo de un 10,8% en su tercera noche y mínimo de un 3,8% casi al final. Vanitatis ha hablado con el presentador, que asegura ser “un amante del late night”. “No sé si las nuevas generaciones lo tienen presente. Aparte de la historia cultural, está la rentabilidad económica. Alargando un programa contenedor sacan muy buena audiencia. Pero hacer un programa de noche, que cuesta mucho dinero, para sacar peores resultados tora para atrás”.

En esta etapa Telecinco ya había abandonado la idea del late night. “No éramos mejores que una reposición de House. Con esos elementos es muy difícil competir”, comenta el actor y presentador. Comenzó y finalizó su etapa en Antena 3 en 2010. En 2011 lo haría Buenafuente y desaparecería todo rastro del late show en la televisión.

¿Por qué? El late night está ocupado en estos momentos por reposiciones, cine barato y las horas finales de los programas de prime time. En Telecinco, la madrugada está ocupada por Gran Hermano, Hay una cosa que te quiero decir, La que se avecina y Sálvame Deluxe. En Antena 3, por Cine, Sin Rastro y Territorio TV. Son programas sin apenas espectadores pero que rellenan horas de programación. El primer objetivo del late show, que podía costar lo mismo que un prime time, es engordar la cuota de pantalla de la cadena. Algo por lo que, al parecer, ya no están dispuestos a pagar miles de euros. 

 

Era la forma que tenía una cadena de televisión de despedirse de los espectadores hasta la mañana siguiente. El late show era un programa dinámico, entretenido y que rompía el corsé que las cadenas tenían que ponerse en prime time por ser horario protegido. Pepe Navarro fue pionero en España, pero otros muchos cosecharon auténticos récords de audiencia hasta que los espectadores rechazaron este formato. Se aceptó, sin embargo, alargar el chicle del horario estelar hasta altas horas de la madrugada para subir la cuota media del programa.