La peculiar felicitación navideña de Frank Cuesta
El famoso herpetólogo y presentador de DMAX ha hecho público un vídeo para felicitar a sus seguidores y para concienciar a todos del daño que podemos llegar a hacer
Al menos dos millones de pinos, piceas, abetos y otros árboles acabarán próximamente en los vertederos, tras permanecer un par de semanas adornando las estancias de nuestros hogares. Según denuncian varias ONG, en gran parte se trata de especies no autóctonas, que al no recibir los cuidados mínimos para su supervivencia acabarán muriendo. Por ello, se invita a todos a celebrar las fiestas de otra manera, sin utilizar árboles naturales ni artificiales debido al daño que causan a la naturaleza en su proceso de fabricación.
La felicitación navideña realizada por Frank Cuesta, el famoso herpetólogo, va en esta línea. El presentador de DMAX ('Wild Frank') califica de "duro" este simpático vídeo que aprovecha para intentar concienciar a sus seguidores y a todos en general del daño que produce cortar árboles o abetos para adornar durante estas fechas las esquinas de nuestras casas.
Solo el 20% se replanta
Da igual que los abetos adquiridos sean con cepellón, es decir, con sus raíces, porque aunque sean depositados en puntos de recogida tras las fiestas, en la mayoría de los casos llegan a su destino en muy malas condiciones, prácticamente secos. Se calcula que el 80% acaba en contenedores y tan solo el 20% se lleva a replantar. La pequeña parte de los árboles que logran sobrevivir solo pueden utilizarse como plantas de jardín, ya que al tratarse de especies foráneas no deben replantarse en nuestros montes.
Si aún así se opta por comprar árboles de Navidad, que sean de cultivos ecológicos controlados. En cualquier caso debemos tener siempre presente que muy seguramente acabarán convertidos en compost.
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Al menos dos millones de pinos, piceas, abetos y otros árboles acabarán próximamente en los vertederos, tras permanecer un par de semanas adornando las estancias de nuestros hogares. Según denuncian varias ONG, en gran parte se trata de especies no autóctonas, que al no recibir los cuidados mínimos para su supervivencia acabarán muriendo. Por ello, se invita a todos a celebrar las fiestas de otra manera, sin utilizar árboles naturales ni artificiales debido al daño que causan a la naturaleza en su proceso de fabricación.