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Ramón Campos se anticipa a la polémica: "La intención no es reabrir el caso Asunta"
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ENTREVISTA EXCLUSIVA

Ramón Campos se anticipa a la polémica: "La intención no es reabrir el caso Asunta"

"Enfocamos el programa desde la objetividad y la investigación profunda, y haremos una reflexión sobre el papel de los medios de comunicación", avanza el productor

Foto: Ramón Campos, productor ejecutivo de Bambú Producciones.
Ramón Campos, productor ejecutivo de Bambú Producciones.

"Nuestro único objetivo era tratar el caso Asunta sin amarillismo, es decir, recuperar un tipo de periodismo de investigación profunda, de análisis, que se está perdiendo", con estas palabras presenta Ramón Campos 'Lo que la verdad esconde', la nueva serie documental que Antena 3 estrena el miércoles 24 de mayo en prime time. Es por esto que en los tres episodios "no hay nadie que no haya vivido los hechos. No hay expertos que den su opinión sobre la materia", aclara.

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"Ayudar a conocer y a entender a los implicados a nivel psicológico", esa es la explicación de Ramón sobre el programa, ya que considera que "aporta reposo, más información, con lo que a veces se crea una duda razonable, aunque no se buscan cambiar las resoluciones judiciales", anticipándose así a posibles polémicas o ampollas que el programa pueda generar.

La enorme tarea de investigación, llevada a cabo a lo largo de 14 meses, ha sido lo más complicado de 'Lo que la verdad esconde', ya que no era fácil conseguir los testimonios de los implicados: "Lo más duro es encontrarse con el dolor de los protagonistas de la historia. Una situación tan dolorosa y traumática para el entorno y para la sociedad compostelana es complicado de abordar, y por eso ha tardado tanto en producirse el programa".

Queremos hacer una reflexión sobre los medios, ya que muchas veces los acusados entran al juicio como culpables

Además de todas las pruebas y testimonios que el espacio logrará recabar, otro aspecto importante del mismo será, como apunta Campos, la "reflexión sobre el papel de los medios de comunicación sobre casos como este, ya que muchas veces los acusados entran ya a juicio como culpables, sobre todo cuando se trata de un juicio con jurado popular". Con esta visión más reposada, el público manejará muchísima más información, llegando a actuar "como un jurado al que se le van presentando las versiones de todas las partes implicadas".

Pregunta: ¿Era necesario tratar un caso donde los culpables no estén del todo claros?

Respuesta: Cuando empezamos a investigar no sabíamos todo lo que nos íbamos a encontrar por el camino. Ellos habían sido juzgados y no sabíamos más. Conocía Santiago, sabía los trayectos, más o menos, que habían hecho los padres, y al ver el juicio una vez tras otra... para mí la clave fue la cercanía que tenía con el caso y cómo este afectaba a la sociedad. Y encima teniendo a los medios de comunicación de por medio, me parecía esencial profundizar.

Este es el proyecto que más me apasiona de todos los que he hecho y es porque me impliqué desde el principio. Mi hermana, que trabaja con niños, me dijo que un día uno de ellos, de unos 10 años, le preguntó por qué unos padres mataron a sus hijos. Esa pérdida del hogar como lugar de consuelo, refugio, para un niño me impactó mucho y por eso quise investigar a fondo el asunto.

P: ¿Qué sensación crees que va a dejar en el espectador obtener tantas pruebas más allá de lo que conocen?

R: Lo que creo que va a tener es una visión objetiva de lo que sucedió ese día en Santiago de Compostela, y meses anteriores y posteriores. Pero no hay una dirección hacia la que le queramos llevar, porque nosotros cuando empezamos no la teníamos. Empezamos a investigar con la llamada que dice que hay una niña muerta, y a partir de ahí seguimos con los que la encontraron, que eso ya lo hizo la Guardia Civil, y desde ahí vamos tirando. Haciendo el relato cronológico nos encontramos con sorpresas por el camino. Este relato cronológico a nosotros también nos funciona, porque el espectador no va a saber nunca hacia dónde va.

El espectador será como un jurado al que se le presentan las pruebas de todas las partes

P: ¿Qué sucede si encontráis evidencias que contradicen pruebas de la policía o el caso?

R: Nosotros no decimos que hay pruebas malas, aportamos a lo mejor otro enfoque para que el espectador extraiga sus propias conclusiones. Analizamos cada prueba que se presenta, cada testimonio que hay, y nosotros vamos a refutarlo. O bien con otros testimonios o bien con pruebas o indicios. El espectador estará frente al televisor como si fuera un jurado al que se le presentan todas las versiones de las partes.

P: ¿Fue complicado implicar hasta tal punto a la Guardia Civil, sabiendo que además podríais dejarles en evidencia en su trabajo?

R: Han sido supergenerosos con nosotros. Se han prestado a todo. Han aceptado, en todo momento, las entrevistas más duras. Confían plenamente en su trabajo, se hayan equivocado o no, por eso se exponen de ese modo.

P: ¿No perjudica a la objetividad del programa hablar con partes tan implicadas como puede ser la visión sesgada de los abogados defensores?

R: No, porque lo bueno de nuestro relato es que no está hecho por ninguna de las partes, sino por todas ellas. Confrontamos relatos todo el tiempo a través de las entrevistas. Por eso es muy bueno tener tantas conversaciones. Una de las que más me gustó fue en una en la que no intervine, donde era el juez quien respondía a las declaraciones del abogado y a la inversa. Nosotros desaparecíamos y era como un debate entre ambos tras el que posteriormente podríamos arrojar algo de luz.

Teníamos claro que habría informaciones sesgadas, por eso ha sido tan importante tener 14 meses de margen para trabajar recopilando testimonios y evidencias. Siempre había dudas sobre las versiones que nos daban, por eso era importante poner todo en tela de juicio e ir subiendo la tensión en las entrevistas. Evitar el discurso oficial y sacar mucho más. Al final encontrábamos una verdad, la suya, y la llevábamos a otro sitio y nos abría puertas porque otros quería dar su versión del mismo hecho.

La Guardia Civil se ha prestado a todo. Confían plenamente en su trabajo, se hayan equivocado o no

P: ¿Por qué la inclusión de las opiniones de las amigas de Rosario Porto, si no aportan más que su opinión?

R: Era necesaria para equilibrar el programa. Necesitábamos incluir más del círculo íntimo, muy reacio a hablar por todo el impacto emocional que les causó el suceso. Los padres pudieron cometer un delito, pero no han sido asesinos durante 40 años, por lo que necesitábamos un relato sobre Rosario Porto, sobre cómo se comportaba con su hija, la relación entre el matrimonio... Era algo importante para equilibrar el relato mostrando la parte humana del personaje, porque la acusación contra ella es demasiado bestia.

P: Después de los 14 meses de trabajo, ¿tienes una idea formada de lo que pasó, aunque no la quieras revelar para no influir?

R: No. Ninguna. Te lo juro. Cada día hay momentos en los que pienso una cosa y después la contraria. Se lo decía a la propia Rosario, que no sé si es culpable o inocente, pero mi labor es la de hacer una investigación periodística objetiva donde son los jueces los que deben decidir. Ellos pensaban que íbamos a ayudarles y no era el caso, solo investigar.

P: ¿No es más difícil hacer un programa de estas características sin tener una opinión, un fin, una historia que perseguir desde el inicio?

R: Sí, claro, pero también eso lo hace todavía mucho más interesante. Es un caso tan difícil, tan complicado, que reducirlo a una hipótesis sería simplificarlo. ¿Cómo un matrimonio que se quiere se acaba divorciando y asesinando a su hija, que además es adoptada? Su casa es un templo dedicado a ella, ¿qué pasó ahí? Si fueron ellos es brutal, pero si no fueron ellos, también.

Reducir el caso a una hipótesis sería simplificarlo

P: Esta investigación coincidió en el tiempo con la primera temporada de 'Bajo sospecha'. ¿Te llevaste algo de esto a la serie?

R: Nada, porque los guiones ya estaban escritos. La ficción es una mierda comparada con la realidad. Los guionistas de ficción siempre tenemos mucho miedo a que coincida con la realidad, algo que nos pasó un poco con 'Desaparecida' y el caso Madeleine, para que no nos acusen de inspirarnos en ello. Cuando sucede todo esto pedí que estuviéramos muy atentos a posibles coincidencias porque entonces habría que meterle tijera al guion. Cuando detuvieron a la madre y después al padre, alucinamos. La realidad nos superaba con creces.

"Nuestro único objetivo era tratar el caso Asunta sin amarillismo, es decir, recuperar un tipo de periodismo de investigación profunda, de análisis, que se está perdiendo", con estas palabras presenta Ramón Campos 'Lo que la verdad esconde', la nueva serie documental que Antena 3 estrena el miércoles 24 de mayo en prime time. Es por esto que en los tres episodios "no hay nadie que no haya vivido los hechos. No hay expertos que den su opinión sobre la materia", aclara.

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