Theresa May se gana una moción de censura de estilo: bajos arrugados, polipiel, perlones...
Theresa May, la primer ministra británica, se enfrenta, un día más (y ya van unos cuantos) a un momento decisivo en su, de momento, breve mandato. La
Este es probablemente nuestro look favorito. Un par de tacones, unos peep toes de charol rojo, rompen el estilismo del clásico traje de chaqueta. Nos sobran los bajos, por cierto.
La ministra lleva en esta imagen un look de oficina con una chaqueta gris corta y jaspeada. Los zapatos animal print, su gran pasión, vuelven a ser lo más llamativo de todo el conjunto. Tampoco falta la perla gigante alrededor del cuello. Ambos elementos son frecuentes en su indumentaria.
La americana escocesa le da una formalidad muy a tono con su cargo. La abertura de la camisa le confiere un aire muy masculino.
Este vestido de corte asimétrico le marca, por una vez, la cintura. En esta ocasión vuelve a dar la nota con los zapatos. Las bailarinas, con su lacito y su estampado de labios, son muy adecuadas para un after party.
Los zapatos animal print vistos de cerca revelan el porqué son lo más frecuente de su look. Un vistazo en las distancias cortas revela que los adornos parecen Swarowskis de chino. A May le apasionan este tipo de zapatos, pero no siempre acierta con ellos.
En esta foto en la que aparece con su marido el look es totalmente de sport. El color rosa palo de la camisa va a juego con el de la que lleva su pareja. Los complementos le dan un toque juvenil, aunque el cuello abierto no le queda excesivamente bien.
Este es, sin duda, el look más formal. El sombrero a lo carreras de Ascot es muy apropiado para una recepción. En esta ocasión, el habitual toque moderno de May es un fracaso, ya que los guantes de piel negro no encajan con el atuendo, ya que el abrigo es azul y el vestido rojo.
Aquí opta, sorprendentemente, por los tacones de punta fina. Las perlas oversize vuelven a ser muy llamativas, pero el look de chaqueta corta es de nuevo bastante discreto. Es llamativo que siempre pone un toque moderno al conjunto, en este caso la cremallera de la chaqueta.
De todos los colores, de todos los estilos. En esta imagen podemos comprobar que el gusto por calzarse bien es una de las principales características de la ministra.
Esa manera de combinar una falda que no llega a la rodilla con una botas que rozan la sicodelia no parece demasiado acertado. Uno más.
Theresa May, la primer ministra británica, se enfrenta, un día más (y ya van unos cuantos) a un momento decisivo en su, de momento, breve mandato. La miembro del partido conservador lleva unos meses intentando cerrar con acuerdo la salida del Reino Unido de la Unión Europea sin demasiado éxito y sus pactos para el Brexit sufrieron este martes 15 de enero una nueva derrota.
Dos años y medio han pasado desde que llegara a Downing Street esta mujer que fue bautizada y comparada con la dama de hierro, Margaret Thatcher. La premier llegaba en “tiempos inciertos y difíciles”, según declaraba ella misma, y ha tenido que afrontar numerosos retos en un escenario muy difícil.
Amante de las perlas y de los zapatos extravagantes, el estilo de May es digno de un buen examen. Vanitatis ha analizado sus estilismos para saber qué hay detrás de los atuendos de una mujer aparentemente conservadora en el vestir, pero con muchas sorpresas si se la mira con lupa.
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