Karl Lagerfeld monta una brasserie para su desfile de Chanel en París
Ya ha montado una manifestación feminista, una galería de arte y un supermercado fashion, así que, si seguimos jugando a las profesiones, antes o después nos
CHANEL: la invitación ya dejaba claro que iba a ser una mañana de alternar con los amigos al calor del amor en un bar.
CHANEL: la maison enseñó la escenografía del desfile justo antes de que empezara.
CHANEL: y Karl Lagerfeld salió a saludar a los parroquianos de su bar.
CHANEL: por lo visto, todas las editoras estuvieron tentadas de llevarse la vajilla. Ya sucedió con los falsos productos de ultramarinos del desfile de hace exactamente un año. La foto es de la cuenta de Instagram de la bloguera @thefashionadroit.
CHANEL: los camareros calentaron motores.
CHANEL: como siempre, Sam McKnight, encargado de la creación del look de pelo de todos los desfiles de Chanel, ha colgado en su Instagram las mejores fotos de 'backstage'. En esta imagen, Cara Delevingne, Kendall Jenner y Lily Donaldson.
CHANEL: Lagerfeld, una vez más, reinterpretó todos los códigos de la maison, como la combinación negro-beis.
CHANEL: más códigos de la casa con una nueva vuelta de tuerca al tweed y un toque de casaca de ascensorista.
CHANEL: cuadros y tweed en combinación falda-abrigo corto.
CHANEL: vestido con logo a media pierna.
CHANEL: mix de estampados.
CHANEL: dos piezas estilo años 70.
CHANEL: cuadros y tweed con paraguas a juego.
CHANEL: 'prints' geométricos y abundancia del color lila.
CHANEL: blanco y negro con puntilla que recuerda a los uniformes de su desfile Métiers d'Art de diciembre en Salzburgo.
CHANEL: plumas, cuadros y flores.
CHANEL: Abrigos hasta los tobillos.
CHANEL: más negro y más beis.
CHANEL: un look que parece inspirado en los que hace Alexander Wang.
CHANEL: Cara Delevingne se despide de un camareri muy especial, el modelo (y amigo especial de Karl Lagerfeld) Baptiste Giabiconi.
Ya ha montado una manifestación feminista, una galería de arte y un supermercado fashion, así que, si seguimos jugando a las profesiones, antes o después nos iba a tocar hacer de camareros. Karl Lagerfeld ha convertido el Grand Palais, donde desfila siempre, en un antro de lo más parisino, con camareros de blancos delantales y pajaritas negras que sirven pastis, absenta y café au lait a sus modelos. Todo con el objetivo de descubrir al mundo la colección de prêt à porter de Chanel otoño-invierno 2015/2016. Como en la Brasserie Lipp de la Rive Gauche, donde no es difícil encontrarlo (a él y a toda la fauna del mundo de la moda) desde los años 70, pero con nombre chaneliano: la suya se llama Brasserie Gabrielle. Cara Delevingne y Kendall Jenner no han faltado a la cita.
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