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Gala MET 2015, de Beyoncé a Sarah Jessica Parker, las mejor y peor vestidas de la noche

Es verdad que el tema se prestaba a ello: China y su universo dan para mucho en cuestión de disfraces. Pero lo cierto es que pocas

Rihanna. Con vestido-capa amarillo del diseñador chino Guo Pei, hecho a mano nada menos que durante dos años. Te podrá gustar o no, pero digno de la gala sí que lo es.

Sarah Jessica Parker. En plan diosa de fuego va hecha un cuadro, aunque el vestido de H&M no sea lo peor, y el tocado esté firmado por Philip Treacy.

Solange Knowles. ¿Nos hemos vuelto locos? De Giles Deacon.

Cara Delevingne. Sabemos que te gusta llevar los pantalones, pero este ¿esmoquin? De Stella McCartney, no está a la altura...

Poppy Delevingne. Espectacular con su vestido de Marchesa. La hermana 'buena'.

Rita Ora. De rojo y de Tom Ford, al margen de cualquier elegancia.

Alexa Chung. De lo mejor de la noche, por Erdem.

Cher. De miedo, la verdad.

Emma Roberts. De Ralph Lauren. El vestido es bonito, pero no le sienta. Ni el color.

Jennifer López. Muy guapa con su dragón rojo, aunque elegante...

Alicia Keys. Acompañada de Jean Paul Gaultier y con un vestido firmado por él. Guapa y elegante, aunque de China tenía poco.

Anne Hathaway. ¿Caperucita qué exactamente...? El vestido, mono, pero para otra ocasión más años 50, de Ralph Lauren.

Anna Wintour. Querida, esto no es predicar con el ejemplo. Aunque vayas de Chanel.

Beyoncé. ¿Vestido, qué vestido? Una gasa habría tapado más, por mucho... que lleves un Givenchy.

Claire Danes. De Valentino verde. Bueno...

Elizabeth Banks. Juega al turquesa de Michael Kors. Un vestido correcto; el resto, opinable.

Chloé Sevigny. ¿Qué fue del antaño icono 'indie'? De J W Anderson.

Kim Kardashian. Para variar, deja poco a la imaginación, pero el vestido de Roberto Cavalli es espectacular.

Emily Ratajkowski. Muy china y elegante. Y sobre todo muy tapada, poco habitual en ella. De Topshop, o ¡viva la moda asequible!

Diane Kruger. Llevó los pantalones, como Cara, pero los suyos son de Chanel.

Gong Li. Elegante y muy propia, claro.

Irina Shayk. De Dior. Luciendo palmito, y aunque el vestido no es elegante, guapa sí que está.

Ivanka Trump. De azul eléctrico y palabra de honor. Firmado por Prabal Gurung.

Marisa Ann Meyer. La CEO de Yahoo! Iba más que correcta, y de rojo.

Keri Russell. Parecía que iba a otra gala, pero su vestido de Altuzarra es digno de una alfombra roja.

Kendall Jenner. Muy guapa, de Calvin Klein Collection.

Allison Williams. La chica de rojo, con un maravilloso Giambattista Valli. El diseñador es quien la coge de la cintura.

Amanda Seyfried. Un Givenchy blanco muy elegante, aunque el color no es el que mejor te sienta. Correcta, eso sí.

Amal Clooney. La pareja de moda no desentonó, pero tampoco epató. Amal iba de rojo palabra de honor firmado por Maison Martin Margiela by John Galliano.

Rosie Huntington Whiteley. O ¿China a mí? A quién le importa el tema si yo voy ideal... Y, además, de Versace.

Karlie Kloss y Gigi Hadid. Muy guapas, ¿pero qué menos se les puede pedir? Quizá un poco más de imaginación. Karlie Kloss, de Atelier Versace; y Gigi Hadid, de Diane von Furstenberg.

Livia Guggioli y Colin Firth. La pareja más 'british' iba de lo más correcta y ecológica. Ella, con un vestido hecho con botellas de plástico reciclado firmado por Antonio Berardi.

Kate Hudson. Correcta y poco más –si acaso poco menos– de Michael Kors.

Hailey Baldwin. Muy mona, aunque no muy apropiada para una alfombra roja. Como otras jóvenes 'it', se apuntó a Topshop.

Sienna Miller. O ¡viva la diferencia! De Thakoon, la verdad es que parece más un traje corto, pero nos gusta...

Madonna. Un cuadro, la verdad.

Jennifer Connelly. Salió con la alfombra de casa puesta. O con el tapete de la abuela. Eso sí, de Louis Vuitton.

Ashley y Mary-Kate Olsen. Las gemelas más góticas de la noche, de Dior Vintage by John Galliano.

Jessica Chastain. Se empeña y se empeña en los vestidos de línea sirena y, siempre, se pone años. Aunque de Givenchy pesan menos.

Karen Elson. Esta sí que se equivocó de gala... ¿o de pagoda? ¿Desde cuando Dolce & Gabbana se inspira en China?

Kerry Washington. Lo peor no es el vestido. Es la mezcla de colores sobre la alfombra roja. ¿Tarta de fresa y menta?, ¿look sandía?

Katie Holmes. Nuevo look y nuevo estilo, con este elegante vestidazo de Zac Posen.

Chloë Grace Moretz. Otra que se equivocó de gala, vestida por Coach.

Grace Coddington. Se equivocó de fecha y de fiesta: ¡no era la de pijamas!

Miranda Kerr. En versión mini y de lo menos adecuada, la verdad.

Georgia May Jagger. Una batita, de Gucci eso sí, pero parece del chino de la esquina. Oriental sí que es oriental, vaya.

Selena Gomez. Blanca y radiante, pero para otra fiesta... O una boda, la suya. Con vestido de Vera Wang.

Jennifer Lawrance. Irreconocible, la verdad. Cortes, asimetrías y otros detalles que no estaban a la altura. De Dior Haute Couture.

Olivia Wilde. Suele acertar, pero este Prada no es de lo mejor que le hemos visto.

FKA Twigs. El estreno sobre la alfombra de la novia de Robert Pattinson no podía ser peor. Firmado por Christopher Kane.

 

Es verdad que el tema se prestaba a ello: China y su universo dan para mucho en cuestión de disfraces. Pero lo cierto es que pocas acertaron. Muchas porque se pasaron y otras porque no llegaron. Este es el resultado de la quiniela fashion de la noche. A disfrutar de las vistas

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