Cannes 2015: lo mejor y lo peor de la alfombra roja del festival de cine
Cannes sigue sumando glamour cada velada. Y otra vez ha venido de la mano de nuestra Nieves Álvarez, imponente con su vestido del francés al que
Una clase magistral sobre cómo llevar volantes sin cursilerías con este vestido en rosa empolvado de Gucci.
A lo largo del festival ha probado todos las formas y tamaños. Le faltaba el minivestido de lentejuelas. Es de Dior. Sobresaliente también.
Demasiada pierna y mucha rejilla. Aunque, desde luego, salero, gracia y soltura nunca le faltan.
Uno más de esos vestido espectáculo que tanto se ven en Cannes: escote corazón y cola larguísima.
Miss Francia 2005 también ha pasado por la alfombra roja de Cannes y lo ha hecho enfundada en un vestido rosa salmón.
No sorprende la francesa con su elección de este Christian Dior Couture bicolor.
La ex de DiCaprio se atreve con la espalda al aire porque sin duda se lo puede permitir.
Lo de marcar pezones en una camiseta con dibujo de palmera no nos convencía mucho. Pero que lleves unos zapatos tan bonitos con un pantalón que se abalanza sobre ellos es un crimen.
El vestido de Ralph & Russo Couture es precioso. La modelo tendría que haber comprobado ante el espejo que no se le transparentaba la ropa interior color carne. Aunque quizá le dé igual.
La top china se caracteriza por su sutileza, también al vestir para un festival de cine.
No es un pájaro, no es un avión, no es un esmoquin ni es un vestido, es una de esas idas de olla de Gaultier en el cuerpo de la actriz china.
La española lució cuerpo, estilo y elegancia con este vestido de Stéphane Rolland, el diseñador francés para el que siempre desfila. La cartera de mano y el maravillosos collar Serpenti son de Bvlgari.
El primer diseño español en Cannes, este espectacular vestido azul de Azzaro, una casa de alta costura parisina con dúo creativo nacional al frente: Álvaro Castejón y Arnaud Maillard, Alvarno. Y lo luce la recién casada Nikki Reed del brazo de su flamante marido, Ian Somerhalder.
Marcando abdominales porque se lo puede permitir, la top del clan Kardashian ha elegido (muy bien, por cierto) un dos piezas de Azzedine Alaïa.
Se convierte en el ying para el yang de Kendall, con este conjunto de top y falda que también muestra tripa y ombligo de la modelo portorriqueña.
El color de este vestido de Prada de satén de seda, un original azul petróleo, le sienta muy bien al rostro. La sutil sugerencia de su escote cerradura es mucho más sexy que todos los ombligos de la noche juntos.
El vestido no dibuja bien sus curvas o se pierde por el camino. Y, curiosamente, Lara parece un versión joven de Vivienne Westwood.
Con dos aberturas y los brazos en jarras se luce mejor este modelo de cuadros. Original estampado para una 'red carpet'.
El vestido es soso y de pelos va fatal. No, nosotros tampoco sabemos por qué le hemos dado el sello de aprobación. Quizá porque simplemente no va mal.
Demasiadas bolsas y arrugas a la altura del tronco, y muy ajustado en las rodillas. El vestido no es feo y Rossy está muy guapa, pero el efecto es extraño; como de saco de patatas glamouroso.
Aceptamos princesa con todas sus consecuencias. Uno de los pocos vestidos de Ralph & Russo que pasa el corte. Las proporciones no son excesivas y el bordado sobre lo que parece tela de organza es preciosista.
Parece un pijama de rayas con pretensiones de vestido.
Por detrás el abullonado en fucsia es un poco estrafalario, pero por delante queda así de impecable este Schiaparelli Couture.
Radiante vestida de blanco y con profundas aberturas en escote y pierna.
El vestido de Elie Saab Couture tiene un ligero degradado de color que lo hace todavía más armonioso. Pero lo sobresaliente de verdad es la clase con que lo lleva Nieves Álvarez. Un 10 rotundo.
¿Quieren un ejemplo de lo contrario a la clase de la Álvarez? Aquí tienen el estilo 'elefante en una cacharrería' con el que Nemcova lleva este Zuhair Murad, que se pasa de volúmenes y tiene un punto cursi con las florecillas azules.
Recuperamos la respiración con este magnífico Armani Privé con cinturón 'obi' que lleva con gracia infinita la actriz australiana.
Y regresamos al infierno con Isabeli Fontana. Y no porque el vestido sea feo, que no lo es. Por todo lo demás. ¿Qué pelo es ese que parece pegado a la frente como si estuviéramos en una versión 2015 de 'Algo pasa con Mary'? ¿Qué forma es esa de llevar el bolso de mano como si estuviera a punto de lanzarlo cual pelota de béisbol? ¿Y, por Dios bendito, qué le pasa a ese dedo del pie que le gana la carrera a la sandalia por varias cabezas?
Va vestida como le corresponde: como una preciosa sirena de la corte del rey Midas.
La otra cara de la moneda. La top que más se parece físicamente a la Shayk elige una versión Jessica Rabbit de sí misma, y nosotros, desde aquí, la aplaudimos.
El vestido es teatral, exagerado y demasiado pomposo para alguien de quien acabamos de aprender el nombre. Lo firma, con unas cuantas plumas de más, Ashi Studio.
Es lánguida, sí, pero vestida de princesa de cuento con este Luisa Beccaria de tul en color lavanda nos ha conquistado.
¿Somos nosotros o ese Elie Saab le hace una cadera desmedida y, por contra, un pecho minúsculo? No nos gusta nada. Preferimos que nos metan en el ojo cualquier modelito apretado de Eva Longoria o los pezones respingones de Salma Hayek que sufrir la visión de este horror de elección.
Este vestido de Stella McCartney convierte el cuerpo de la actriz británica en una Afrodita A moderna con unos hombros envidiables.
Hemos estado a punto de decir 'no', porque la longitud y el volumen de la falda del vestido hacen cosas extrañas. Pero hay que reconocer que está francamente guapa con este Christian Dior. Curiosamente, Jennifer Lawrence llevó uno muy similar en este mismo festival en 2013.
Parece que le ha robado el Lanvin a su hermana mayor y se lo ha plantado sin mirarse al espejo. No nos extrañaría nada que saliera un meme de 'Fray Perico y su borrico' en breve en las redes sociales. Y si no es sí, lo reivindicamos.
No es precisamente la alegría de la huerta con este vestido negro, pero está elegante.
Eso no es una sirena... es algo indefinido entre barco varado, león marino y lata de refresco.
Le queda bien ese Stella McCartney con cinturón dorado. Pero le sienta aún mejor John Lasseter a su lado.
Espléndido el vestido de Elie Saab Couture, el color coral tan distinto del azul que el diseñador presentó en pasarela y el cuerpazo que lo viste. Y olé por esa melena suelta.
Nos da una pereza que no sabemos ni cómo empezar a definirla. Este vestido de Gabriela Cadena, en lugar de adaptarse al cuerpo de Eva, parece que lo desdibuja.
La modelo portuguesa se estrena en la alfombra roja de Cannes con este vestido negro con cuerpo de formas geométricas y su eterna sonrisa.
Tú dices Elie Saab; yo digo avestruz correcaminos que se ha comido un elefante. Como la boa de 'El principito', pero en versión 'red carpet' y sin espiritualidad ninguna.
Sosaina pero correctísima con este Zuhair Murad.
La top estuvo a la altura de las circunstancias con este vestido gris metalizado.
Este conjunto de inspiración hindú es de su creador favorito, el diseñador de vestuario de su serie 'The Mindy Project', Salvador Pérez. Nos gusta por la combinación de colores y porque no se arredra ante la posibilidad de demostrar que las mujeres de verdad tienen curvas y están orgullosas de ellas.
El azul marino de este Atelier Versace que dibuja con elegancia las curvas de la actriz es un rotundo sí.
No nos extraña que el director creativo de Gucci Alessandro Michele la mire embelesado, es la perfección absoluta con ese vestido de tirantes de la firma italiana.
Con un estampado muy original y formas escultóricas, una elección de 10 este Giles de la actriz australiana.
Si desde aquí le vemos perfectamente los tendones de la ingle, no queremos ni pensar que se debe ver desde allí cerca. El vestido de Atelier Versace es espectacular y atrevido. La forma de llevarlo no nos convence en absoluto.
Y ya que hoy parece que nos obsesiona la castidad, no podemos dejarle pasar este escote a Salma. Por muy bien que tenga el pecho, que no lo negamos, si los senos se juntan en el medio, acabas pareciendo una mesonera tirolesa te pongas lo que te pongas.
No ha dejado a Xavier Dolan ni a sol ni a sombra. Otra vez colgada de su cuello, como el primer día, la actriz está guapísima con ese vestido de Sonia Rykiel y con ese peinado de trenzas en corona.
Hay una razón por la que a esta mujer la imita medio mundo: sus elecciones son sorprendentes, se salen de lo común y siempre resultan inspiradoras.
Los franceses se empeñan en convertirla en 'it girl', y puede que borde el estilo sin género que tanto se lleva ahora, entre masculino y andrógino. Pero en la alfombra roja de Cannes siempre acaba hecha un cuadro. Este vestido de patchwork no nos dice nada de nada.
Etéreo, como le gusta a ella, así es este vestido.
Se atreve con el look bohemio soñador con este magnífico vestido de Valentino. Y da en el clavo.
Ella, de Armani Privé, está más que decente. Él, con esmoquin granate y negro de Dolce & Gabbana, está espectacular.
Monísima de Prada y con la melena casi suelta. Y ese complemento que se ha colocado en la cintura (el actor Matthias Schoenaerts) nos lo pedimos para Reyes.
Si esto es lo que se consigue con el aerobic de los años 80, nos apuntamos ya. Está magnífica con este vestido de Atelier Versace.
Acaban de anunciar que va a encarnar a Jackie Kennedy en una película. Por este Christian Dior Couture que ha elegido para el estreno de 'A tale of love and darkness', su primera película como directora, cualquiera diría que en realidad se quiere convertir en Audrey Hepburn.
La esposa de Matthew McConaughey eligió un vestido de Gabriela Cadena, una diseñadora ecuatoriana de la que ya se ha vestido en varias ocasiones.
Ligera y sencilla con este vestido de encaje que resalta sus formas.
Este Ralph & Russo está demasiado abullonado en la cadera.
Parece una sirena de Hollywood, entre Veronica Lake y Kim Basinger en 'L.A. Confidential', con este vestido de Michael Kors
La forma del vestido es perfecta y le sienta francamente bien, pero el estampado de cebra lo estropea un poco y los zapatos con plataforma ortopédica terminan de rematarlo.
Ideal va la jovencísima estrella de cine chino.
Un mono arriesgado pero muy elegante. Aplaudimos la elección de la actriz belga.
Perfecta de blanco y con sandalias de tiras con un toque étnico que elevan el conjunto.
Tiene 87 años y un cuerpo serrano para alfombras rojas, series de televisión, conciertos en directo y todo lo que le echen. Y aunque nos encanta el conjunto estampado de ir a la playa (con bolso que desde aquí parece una bota de vino), nos habría gustado todavía más si hubiese seguido la estela de Catherine Deneuve y su Gaultier de doble tono.
El vestido de Christian Dior Couture resalta sus hombros torneados y le saca formas que habitualmente no le vemos. Por cierto, es azul. Parker Posey, de incógnito y disfrazada de diva del viejo Hollywood, parece el contrapunto cómico perfecto.
Otro vestido con transparencias en los costados. Pero, al contrario del que lucía ayer, los cortes transversales y el color de este la estilizan bastante.
La belga se ha puesto un Elie Saab confeccionado en la misma tela de encaje que el vestido palabra de honor que lucía Blanca Suárez el día anterior. Y hasta parece más delgada que en la velada de inauguración.
La cantante antes conocida como Cheryl Cole (ahora lleva el apellido de su actual esposo) lleva demasiado de casi todo: capa, cola, mucho cuello y encaje. Quizá solo un par de elementos habrían sido más que suficientes. Este Ralph & Russo Couture estaba hecho para destacar, pero el color tampoco termina de convencer.
Elegante en este vestido de satén.
Todos hemos tenido ese momento 'me coloco dos bolas en la cabeza' para ir a comuniones, bodas, fiestas de la oficina... Pero nunca se nos habría ocurrido llevarlas a Cannes.
Parece un salto de cama en negro viuda pero es un conjunto de Schiaparelli Couture. En el desfile, la modelo llevaba la camisa completamente abierta. Quizá un poco más de piel en la parte superior habría equilibrado el conjunto.
Así es como se lleva un vestido de alta costura de Christian Dior. Lo sorprendente no es la elección de la firma (después de todo, la actriz es imagen de su perfume J'Adore), sino todo lo demás: el color es atrevido; la cola, impresionante; el escote, moderno. Y ha vencido la tentación de colocarse una gargantilla. El equilibrio ideal para un tono tan chillón son unas joyas al mínimo: solo unos pendientes pequeños y un par de anillos de Chopard.
La española hizo su debut en esta edición del Festival de Cannes con este vestido palabra de honor con flores bordadas.
La actriz mexicana presentó 'Tale of Tales' con este vestido de Alexander McQueen que es un punto demasiado folclórico.
Un no rotundo. Este Zuhair Murad requiere mucho menos volumen de cintura por los lados; si no, simplemente parece que te han embutido en una media color carne.
Impecable otra vez con este vestido de encaje negro de Ralph Lauren. El collar es de Bvlgari.
Ha apostado por un vestido granate de Givenchy, que le proporciona el equilibrio justo de modernidad: ese corpiño de piel de cocodrilo que le cubre el pecho; ese hombro asimétrico cubierto de terciopelo, esa abertura a un lado, esas uñas a juego...
Original su look deconstruido (sí, en la moda pasa como en la gastronomía de alto nivel) de Proeza Schouler.
La presentadora rusa tiene el título oficial de estrafalaria máxima del festival, al que acude cada año con un estilismo aún más horripilante que el anterior. Aunque su punto fuerte es el pelo: siempre se lo recoge en cono hacia arriba y consigue hacer las delicias de los fabricantes de laca.
De negro y con vestido de corte sirena está estupenda.
Nos encanta el color y la forma estilo Charles James de este vestido.
Perfecta con este vestido de gasa de la colección Sala Bianca de Valentino.
Hoy toca jardín de flores para la actriz china, perpetrado por Marchesa. Si te vas a poner un vestido tan cursi y tan cuajado de pistilos y pétalos, al menos no le añadas una corona de rosas.
Otro ejemplo de lo mismo: el vestido de Elie Saab en azul 'tie dye' es precioso y el cinturón de piedras le da un toque. Pero el collar de turquesa lo estropea todo. Y, una vez más, hay demasiado pecho pidiendo la libertad condicional en ese escote.
La actriz francesa reivindica la elegancia de la sencillez con este vestido blanco de seda de Alexandre Vauthier que semeja una camisa masculina. Y lo combina con una gargantilla de serpiente de Chopard.
Sobria, elegante y contenida. Con detalles de profesional del glamour hollywoodiense, como esas joyas de Grisogono en plateado para maximizar el impacto del vestido o la melena a un lado con onda ligera en las puntas. Aunque a ratos era difícil distinguirla de la propia alfombra.
Serenidad y aplomo en estado puro. Es lo que transmite este modelo en gris perla de Elie Saab Couture de la colección de primavera 2015 que se ha plantado la actriz. Y aunque las plumas suelen ser un hándicap, en este caso ni siquiera nos molestan.
Su Gucci verde de chifón plisado, con apliques de flores en el cuello, es todo un espectáculo. El moño alto y los labios violetas completan el acierto. Si dejaran puntuar como en el patinaje artístico, levantaríamos el cartelito del 10.
Es minimalista (aunque solo por delante, en la parte trasera la capa tiene un dibujo en rojos digno de Agatha Ruiz de la Prada) y debería ser un acierto. Y, sin embargo, este modelo de Stella McCartney convierte el cuerpo de la actriz en un saco de patatas con capa de superhéroe. Eso sin entrar en que ¿ya está arrugado y aún no ha empezado la noche?
¡El negro en dos texturas de este Armani Privé le sienta tan bien! Si hubiera que ponerle una pega, es que de cerca se intuyen demasiadas plumitas y lentejuelas.
A ver, si el vestido no está mal, pero si no sabes dónde tienes ahora mismo el pecho, está claro que ese escote no es para ti.
La actriz británica se atreve con un vestido amarillo con escote palabra de honor y abertura lateral, y no se equivoca.
Para lucir embarazo en Cannes, la modelo francesa se ha plantificado el vestido playero de Chloé que todas querríamos llevarnos de vacaciones. Pero esto es una alfombra roja, no una playa de Ibiza.
Impresionante en este minivestido metalizado de Louis Vuitton. Aunque no nos convencen los zapatos.
Audaz y acertado. La top model tiene el cuerpazo perfecto para lucir este modelo troquelado mitad falda mitad pantalón de Atelier Versace, que deja al descubierto más piel de la que parece a simple vista.
Este modelo menina de Velázquez ha suscitado muchas dudas. Al final, la balanza se ha decantado hacia el sí, admitimos pulpo como animal de compañía. Por el color 'nude' y por el bordado negro sobre tul. Pero hay mucho festival por delante y la modelo y 'socialite' es una fiel de todos los días del festival. Ya la criticaremos mañana, que seguro que nos da razones para hacerlo..
Se agarraba con tanto ímpetu a todos sus compañeros del jurado de Cannes del que forma parte (aquí, con Xavier Dolan) que no ha habido manera de sacarle una sola foto en la que saliera ella sola. El vestido de Lanvin en azul petróleo con contraste en negro, atado en un hombro, es ultrafavorecedor.
La actriz china juega al impacto y el vestido de Ralph & Russo Couture impacta, desde luego, pero hay un exceso de cola, de mangas y de flores bordadas.
La modelo israelí parece una diosa griega con este vestido toga en blanco vestal de Roland Mouret, el favorito de Nieves Álvarez.
Otra diosa del modelaje vestida de blanco virginal, pero con aberturas estratégicas de lo más sexy. El vestido es de Atelier Versace.
Tiene un cuerpo impresionante y es un ejemplo de bellezón a los 64 años. Pero el estampado del vestido parece de cortina y el drapeado de los volantes delanteros tiene un punto demasiado cursi.
A medio camino entre el mantel de picnic, la misa rociera y el delantal del chino de debajo de casa. Sorprendente es, desde luego; feo también.
Cannes sigue sumando glamour cada velada. Y otra vez ha venido de la mano de nuestra Nieves Álvarez, imponente con su vestido del francés al que tanto ama Stéphane Rolland. En la última jornada también lucieron palmito la actriz Marion Cotillard o la modelo Jordan Dunn. No les hemos quitado el ojo. Antes habíamos hecho lo mismo con la maniquí de moda: Kendall Jenner. Además de tops de nivel, como Irina Shayk, Doutzen Kroes, Petra Nemcova y Adriana Lima, hubo representación española en la séptima velada del festival con una Nieves Álvarez en estado de gracia. Y también en la sexta, con Eugenia Silva, en una noche en la que también estuvieron presentes las cómicas americanas Amy Poehler y Mindy Kaling.
La noche del domingo volvió a mostrarnos a una entusiasta Sienna Miller y a unas cuantas mujeres estilosas: de Eva Longoria a Cate Blanchett. El sábado fue la cuarta jornada del festival y le tocó a Natalie Portman repetir paseíllo por la alfombra roja. Lo hizo enfundada en un vestido de Christian Dior Couture. Lo mismo que Naomi Watts, a la que fue imposible fotografiar sin Matthew McConaughey. No faltaron ni Jane Fonda ni Andie MacDowell, y también se pasó por allí Sienna Miller. La noche anterior, Woody Allen se rodeó de sus actuales musas, Emma Stone y Parker Posey, para el estreno de Irrational man, su tercera colaboración con la pelirroja. Ella iba divina de Christian Dior, como Natalie Portman en la inauguración y Charlize Theron el jueves. La sudafricana se midió en la red carpet con Blanca Suárez y Julianne Moore en el estreno de Mad Max: Fury Road.
El festival aporta en 2015 todo un abanico de celebrities propias de la noche de los Oscar: Natalie Portman, Naomi Watts y Sienna Miller han subido el listón de la elegancia, mientras Lupita Nyong’o recuperaba la teatralidad y la audacia de los looks con los que el año pasado dejó boquiabiertos a todos en la temporada de premios. En su 68 edición, Cannes promete sorpresas, mujeres bellísimas, vestidos impresionantes y buen cine.
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