Steichen, el ojo de la moda
Hasta el 3 de mayo, Nueva York muestra en su International Center of Photography las instantáneas del gran Edward Steichen para la editorial Conde Nast. El artista se hizo famoso sobre todo por su trabajo como jefe de fotografía con la para sus revistas de moda Vogue y Vanity Fair. De esta forma no solo captó con su cámara a modelos, sino también a celebridades de Hollywood. En la primera imagen se muestra a Gary Cooper en todo su esplendor: demuestra lo bien que puede quedar un traje de chaqueta. En la instantánea de la derecha aparece la actriz Mary Heberden que empezó a aparecer sobre los escenarios en 1925 y seguiría trabajando regularmente en Broadway en los 30.
En la foto de la izquierda aparece Loretta Young en una imagen para la edición de octubre de 1932 de Vogue. Esta actriz de Hollywood participó en películas como La llamada de la selva o La vida empieza, pero su papel más memorable fue en El extraño, de Orson Welles. A la derecha aparece el propio Steichen en una fotografía para el Vanity Fair de octubre de 1929.
Los pies que están enmarcadas en unas bellas sandalias corresponden a la princesa Nathalie Paley, una actriz franco-americana de raíces rusas. En las fotos que Vogue hizo de ella solía llevar los diseños de su marido, el diseñador Lucien Lelong. Conoció a muchas de las principales figuras de la vida social de los años 30, incluso tuvo un affair con Jean Cocteau. A la derecha podemos contemplar a la modelo Margaret Horan apoyada sobre un gran piano. Fue un trabajo para Vanity Fair.
De espaldas y mirando hacia su hombro derecho se sitúa Suzanne Talbot en esta imagen. Lleva un suntuoso abrigo de tela brocada y un sombrero con tul muy acorde con el año en que se realizó este trabajo, 1925.
Los temas de Steichen fueron muy variados, desde la horticultura a las batallas navales. Pero desde 1923 a 1938 desarrolló su trabajo para Conde Nast. En esa época mostró unas instantáneas glamurosas y de irresistible composición como ésta en la que cuatro modelos vestidas con chaqueta sin hombreras miran hacia el horizonte. Se realizo para el número de julio de Vogue.
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