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Domingo, 12 de julio de 2009

Carla Bruni-Sarkozy, quiere poner su tirón mediático al servicio de "una causa útil" como la lucha contra el sida y así lo hará a partir de este lunes, cuando se convierta en "embajadora" mundial contra esa enfermedad. Dice la primera dama francesa, cantante y ex modelo que quiere “aprovechar mi propia mediatización para una causa útil". Así lo  explica la esposa del presidente francés, Nicolas Sarkozy, en una entrevista concedida a la revista Elle, que saldrá publicada el lunes pero que ya han adelantado los principales medios de comunicación franceses.

Bruni ha convocado a la prensa el lunes, coincidiendo con la celebración del Día Mundial contra el sida, para anunciar su nueva misión como embajadora del Fondo Mundial de la lucha contra esa enfermedad, la tuberculosis y el paludismo. "Estaré lo más disponible posible para quienes están sobre el terreno" y que no son tan mediáticos como ella, adelanta en la misma entrevista. En ella comenta además la ex modelo su intención de trabajar para extender la educación a lo largo del territorio francés y combatir el analfabetismo.

En lo que se refiere a su función en la lucha contra el sida, asegura estar dispuesta a trabajar en cualquiera de las actividades del Fondo Mundial, aunque reconoce que espera poder concentrarse en las acciones destinadas a combatir la transmisión del sida de madres a hijos. Lo que pretende Carla Bruni es comunicarse con esas madres y explicarles los riesgos que existen.

En un escueto comunicado, la presidencia francesa anunció el pasado jueves la rueda de prensa que ofrecerá la primera dama francesa para anunciar su nueva misión, en un hotel muy próximo al Palacio del Elíseo, junto al doctor Michel Kazatchkine, director ejecutivo del Fondo Mundial de la lucha contra el sida. Dicho Fondo proporciona dos terceras partes de la asistencia internacional contra la malaria y la tuberculosis y el 20 por ciento de la ayuda contra el sida, con 450 programas en 136 países y un presupuesto de 7.000 millones de dólares (unos 5.380 millones de euros) y será a partir de esta semana cuando la primera dama francesa forme parte de manera oficial del proyecto.

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