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Camilla y los panecillos reales
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Camilla y los panecillos reales

Camilla Parker-Bowles imita a Romy Schneider, aunque con el paso cambiado. Si en su juventud la actriz austriaca fue la protagonista de aquel filme sentimental en

Foto: Camilla y los panecillos reales
Camilla y los panecillos reales

Camilla Parker-Bowles imita a Romy Schneider, aunque con el paso cambiado. Si en su juventud la actriz austriaca fue la protagonista de aquel filme sentimental en el que una panadera enamoraba al emperador, la duquesa de Cornualles parece haber alterado el orden de La panadera y el emperador. Primero, consiguió llevar a altar a su querido Carlos de Inglaterra y, ahora, le ha dado por hacer panecillos.

A la esposa del Príncipe de Gales no se le ha ocurrido otra cosa que ayudar en una panadería de productos orgánicos donde trabajó unas horas. Como cualquier empleado, Camilla amasó y dio forma a uno de los panecillos. Posteriormente, lo puso en una bandeja y lo introdujo junto a otros moldeados por niños en un horno de leña.

“Estaba entusiasmada con sus manos. Fue impresionante”, ha reconocido el propietario de la granja y tienda ecológica que visitó la nuera real. Y que Camilla, siguiendo los dictados de su marido, visitó una feria de productos ecológicos en Devon. Quizás su panecillo sea ahora el mayor atractivo de esta reunión verde.

Pero este no es el primer coqueteo de la duquesa con las panaderías. Hace unos meses, durante una visita a una panadería en Bristol, conoció de primera mano cómo se hacían las galletas de Pascua. De hecho, llegó a amasar algún dulce con bastante buena mano. Fue tal el éxito de la visita, que los responsables le ofrecieron un puesto por si alguna vez se cansaba de ser miembro de la familia real.

Camilla Parker-Bowles imita a Romy Schneider, aunque con el paso cambiado. Si en su juventud la actriz austriaca fue la protagonista de aquel filme sentimental en el que una panadera enamoraba al emperador, la duquesa de Cornualles parece haber alterado el orden de La panadera y el emperador. Primero, consiguió llevar a altar a su querido Carlos de Inglaterra y, ahora, le ha dado por hacer panecillos.