Carolina de Mónaco se olvida de Ernesto

Durante las últimas semanas, el palacio de los Grimaldi en Mónaco ha vuelto a ser motivo de interés general en periódicos y revistas varias por asuntos del corazón. La relación entre el soberano, Alberto, y su pareja, Charlene Wittstock, parece que no atraviesa su  mejor momento y la separación de Carolina de Mónaco y Ernesto de Hannover no para de dar titulares.

El aristócrata alemán ya ha rehecho su vida y así lo atestiguan unas polémicas fotografías con una mujer de origen marroquí, que fueron tomadas estas navidades en una playa de Pukhet, en Tailandia. Pese a la afrenta pública que esto supuso para la princesa Carolina, no dudó en acudir a Hildesheim, Alemania, para defender al que todavía es su marido por un caso de agresiones sucedido hace unos años en Kenia.

Ahora, según se hace eco la web Terra, Carolina de Mónaco no está decidida a perder el tiempo y también ha rehecho su vida junto a otro hombre. Zurs, la estación de esquí alpina donde la casa real monaguesca acostumbra a ir, habría sido el marco incomparable de una historia de amor en ciernes que, pese a los intentos de la princesa por mantenerla en la intimidad, verá la luz en breve con unas instantáneas de la nueva pareja.

Desde Palacio ni confirmen ni desmienten los rumores sobre la publicación de dichas instántaneas. Recientemente, Carolina de Mónaco obligó a la revista Paris Match a retractarse por hacerse eco de unas informaciones que aseguraban que el divorcio entre ambos era una realidad.