La Infanta Elena cae en la tentación de las rebajas
La temporada de saldos tienta a cualquiera. Y sino que se lo digan a la Infanta Elena, que es una de las incondicionales de las rebajas.
La temporada de saldos tienta a cualquiera. Y sino que se lo digan a la Infanta Elena, que es una de las incondicionales de las rebajas. Da igual que uno tenga sangre azul que roja, que eso de comprar a buen precio no entiende de clases.
No es difícil ver a la primogénita de Don Juan Carlos en esta época del año buscando ropa por las tiendas de moda. Eso sí, suele hacerlo en el barrio Salamanca o, como en esta ocasión, en los establecimientos próximos a la madrileña calle Orense.
Allí, rodeada de unas amigas entre las que se encontraba su íntima Rita Allendesalazar, condesa de Ventosa, Doña Elena se decantó por entrar en la conocida tienda Mango, según recoge la revista Hoy corazón, y rebuscar entre las camisas y los complementos.
Para ir de rebajas, la hermana de Don Felipe optó por un conjunto de pantalón ancho de cuadros y parka a juego en tonos beige, combinados con botas y bolso marrón y una bufanda de colores además de unas gafas de sol rojas que se colocó a modo de diadema-.
Si algo llamó la atención de la infanta -que lucía el pelo largo, algo habitual últimamente- fue un par de zapatos, a los que no pudo resistirse y que finalmente adquirió.
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