El limitado papel de las infantas y Urdangarín en los actos institucionales

Esta misma semana, la Casa Real hacía hincapié, a través de un comunicado, en que las infantas Elena y Cristina seguirán formando parte de la Familia Real, acogiéndose para ello a lo estipulado en el Real Decreto 2917/1981, de 27 de noviembre.

Zarzuela zanjaba de esta forma un asunto que venía coleando durante los últimos días y que llevaba a cuestionarse el papel de la duquesa de Lugo y el de los duques de Palma en la vida oficial del país, ya de por sí reducido estos últimos años, pero por causas ajenas a su pertenencia a la Primera Familia o al Caso Palma Arena, como ya se encargó de aclarar la Casa Real, que sigue, sin embargo, sin pronunciarse al respecto de la situación actual de Iñaki Urdangarín.

De hecho, las actividades oficiales de las dos hijas del rey han sufrido un notable descenso al mismo tiempo que la agenda oficial de los Príncipes, especialmente de Letizia, experimenta un evidente incremento, tal y como señalaron fuentes de Zarzuela a Vanitatis.

La merma en los actos protagonizados por los duques de Palma, que se espera que aterricen a finales de la semana que viene o principios de la próxima en Madrid para pasar las navidadse junto al resto de la familia, se produce muy especialmente desde el año 2009, coincidiendo con la marcha de estos a Washington. Ya ese año, la infanta Cristina asistió a 20 actos oficiales (más de un 50% menos que en 2008), mientras su marido lo hacía a 7 (un 68% menos), según los datos consultados por Vanitatis. 

Desde entonces, tanto Iñaki Urdangarín como su mujer mantienen un perfil bajo en lo que a compromisos oficiales se refiere. En 2011, de hecho, la duquesa de Palma ha acudido a 21 actos oficiales frente a los 6 de su marido.

La actividad de la duquesa de Lugo también se restringió, concretamente un 38% con respecto al año anterior. Su caso, sin embargo, es harto distinto al de su hermana, pues una vez se conoció su divorcio de Jaime de Marichalar, a principios de 2010, sus actos oficiales experimentaron un drástico aumento, concretamente del 36% (38 actos). Este año, la infanta Elena ha acudido a más de una treintena de actos, con lo que su agenda oficial sufre pequeñas oscilaciones pero suele mantenerse estable salvo en el año 2009, cuando únicamente acudió a 24 eventos. De hecho, esta semana continuará con sus actividades y lo hará presidiendo la entrega de la VI edición de los Premios Alfonso Usía.

Los Príncipes asumen más actividades de forma progresiva

La decisión de Zarzuela de que los miembros de la Familia Real que no constituyen su núcleo central (formado por los Reyes y los Príncipes de Asturias) pasen a desempeñar un papel secundario en los actos oficiales y abandonen poco a poco la representación institucional de primera línea se planteó "hace tiempo". Además del traslado de los duques de Palma a Estados Unidos, otra de las razones evidentes de tal medida es la asunción lógica, por parte de los Príncipes, de un número mayor de actos oficiales, que se hicieron más visibles en el caso de Letizia cuando nacieron las infantas Leonor y Sofía.

Precisamente el año en el que nació esta última (2007), la Princesa de Asturias asistió a unos 90 actos oficiales. A partir de entonces, su papel se intensificó de tal forma que, al año siguiente, duplicó el número de actividades a las que acudió. Ya en 2009 y 2010, se mantuvo en torno a los 160 actos y este año -en el que falta por contabilizar la mitad del mes de diciembre- ha sobrepasado ya los 130 actos.